miércoles, 21 de noviembre de 2018

CAMPAÑA ANDALUZA III

La campaña andaluza ha tenido hoy repercusión en la sesión de control al Gobierno en el Parlamento. Casi todos los Ministros, más Ministras que Ministros, han aprovechado sus respuestas para, de una u otra forma, elogiar la labor de la Junta de Andalucía y por ende, la labor del PSOE, y para criticar el PP, que no ha hecho nada.
Todo empezó con el duelo entre Sánchez y Casado por el sucio y feo asunto de la renuncia del Juez Marchena. Que un diputado pueda jactarse de que su partido pueda controlar el Poder Judicial, es totalmente inaceptable y merece al menos, la dimisión inmediata del culpable. Bien es verdad que es legal que lo partidos puedan nombrar los cargos de los Jueces y por tanto esperar ser favorecidos por los mismos. Pero aunque se haga, no se dice. Todos los profesionales deben guardar el secreto correspondiente a su profesión. También los políticos. 
Las sesiones de control al Gobierno van elevándose de tono y hoy el señor Rufián, (de nombre y calidad) ha vuelto a montar tal circo contra el Ministro Borrel, que la Presidenta lo ha tenido que echar del hemiciclo y se ha marchado con el resto de  los Diputados de su Partido, Esquerda Republicana de Cataluña. Y el señor Borrel los ha acusado de que uno de ello le ha escupido al salir. Estamos llegando a tal situación que la palabra más usada por la Presidencia es: ¡Silencio!.
Estamos llegando a la misma situación de los últimos meses de la II República. Menos mal que ninguna pasionaria ha amenazado a ningún diputado con aquello de "Este hombre ha pronunciado su último discurso". A los pocos días apareció su cadáver a las puertas del cementerio. Y enseguida vino lo que vino, lo que muchos parece que desean repetir y otros recordamos para que no se repita.
Pero volvamos a la campaña andaluza. Hasta esta mañana los únicos carteles en los paneles de El Paseo, son los del pesoe que muestran la foto de su candidata, Susana Diaz. Los demás, brillan `por su ausencia incluyendo los tres más capaces. Supongo que van adoptando la costumbre británica de los "marginales", que son aquellos distritos en los que unas veces gana el partido Laborista y otras el Conservador, por lo que los dos partidos tratan de atraer los votos a su favor. En aquellos distritos donde siempre gana uno de ellos, el otro no se esfuerza en competir. 
Pues da la impresión de que los partidos de derecha dan las elecciones por perdidas. Sin embargo Podemos está ya enviando cartas personalizadas, incluyendo la papeleta y el sobre. Hoy se han recibido en mi casa, cinco sobres verdes con la foto de Teresa y Maillo y el lema de ¡Adelante!. Una a mi tercer nieto, que vive en el RU y acaba de cumplir los 18 años, dos para mis hijos, una para mi hermana y otra para mi. Las tengo guardadas esperando que lleguen las demás y cuando pase todo poder contarlas y calcular los euros que nos cuesta ese innecesario sistema, cuando los colegios electorales disponen de suficiente papeletas, sobres y cabinas para la necesaria privacidad. Cabinas que yo  nunca uso, porque todos mis vecinos saben mi voto.
La lista de Podemistas es un verdadero gazpacho de cinco partidos: Adelante Andalucía, Podemos, Izquierda Unida, Primavera Andalucista e Izquierda Andaluza. Muy bien repartidos los puestos entre mujeres y hombres, que no los conoce nadie. ¡Como pa fiarse! dijo mi amigo Gracián cuando vio la papeleta.