martes, 29 de mayo de 2018

LA MOCIÓN DE CENSURA

¿Sabrá que España quiere?
La moción de censura en democracia es un instrumento legal, bueno o malo, según salga. Ya decía Churchill que "La democracia era el menos malo de los sistemas políticos". O sea, que debe haber mejores, pero ¿cual?. Cabe pensar que no hay ninguno bueno y que por tanto aceptamos el "menos malo".
Tiene como finalidad acabar con el gobernante que no lo hace bien y nombrar otro que se supone que lo hará mejor. Pero es un arma de doble filo y como consecuencia ineludible, el que la pierde, tanto sea el que la presenta o el que la recibe, debe dimitir de inmediato e irse a su casa. Hasta ahora en España no ha triunfado ninguna y tampoco ha dimitido nadie. ¿Somos diferentes?. Ya en tiempos de Franco se contaba, a pesar de la criticada censura, lo del camino del Pardo, "En el que había una ermita, con un letrero que dice, maricón el que dimita". Y claro, no dimitía nadie, pero el Jefe del Estado cesaba de inmediato al que según su criterio no lo hacía lo suficientemente bien. Le bastaba un motorista que le llevaba  una carta el cesado. 
Mi abuelo me aconsejaba que discutiera, pero no apostara. Pero soy capaz de apostar a que si Pedro Sánchez la pierde, no dimitirá. Por una buena razón: Porque no ostenta cargo alguno institucional para poder dimitir. Es solo secretario general de su partido y este sería capaz de perdonarle el fracaso.
A mi (perdonen la expresión) me jodió ayer la siesta con su discurso ante el Comité Federal para explicar los motivos de la presentación de su moción de censura contra el Presidente Rajoy. Se llevó un buen rato exponiendo diferentes razones ante un comité de compañeros sentados a su alrededor. Fatal error, porque las caras y expresiones de estos, pasaban de hastío a estupor, de incredibilidad a temor y de sorpresa a hartura. Todos los suyos saben que el único motivo es ganar lo que no ha podido ganar en las urnas, por la sencilla razón que nadie lo quiere, incluyendo a muchos de sus compañeros de partido. Menos mal que el parto va a duran poco y solo tendremos hasta el viernes, para aguantar a los medios de comunicación y a los políticos dando sus dispares opiniones de lo que esperan que pase.
Aquí en España (me niego a decir  "este país"  como acostumbran a decir los de la izquierdas) todos saben de política más que los políticos y nadie respeta la opinión de los demás, a menos que llegue a coincidir con la suya. Ya lo dijo Franco (que tenía más sentido socialista que los de ahora) que "Que él era un ciudadano que tenia que cuidar de 30 millones de presidentes españoles". Ahora serían 47 millones de presidente españoles. Más difícil todavía.
Por eso no voy a dar mi opinión sobre lo que pretende Pedro Sánchez con las mentiras que ha contado a su comité federal. Allá ellos. Y allá los que le crean, le soporten y le ayuden a destruir España. Ayer insistió en denigrar a Rajoy y enaltecer a González y Zapatero, lo dos socialistas que dejaron a España en crisis para que las tuvieran que arreglar Aznar y Rajoy. Ya decía la Dama de Hierro, "que lo socialistas eran expertos en gastar el dinero de los demás". Así, que aplíquense el cuento los que piensen ayudarles en la enfermiza ambición de llegar a ser Presidente "cueste lo que cueste y sea como sea". Nos jugamos el futuro de España. ¿Les parece poco?. El viernes, que empieza en mes de junio, lo sabremos y como dice mi amigo Gracián, "¡que Dios nos coja confesaos!.
La últimas noticias de hoy nos dicen que el Ibex ha bajado mientras la prima de riesgo ha subido. ¿Hay alguien, con un mínimo de eso que llaman sentido común, que pueda creer que es culpa de Rajoy y que Sánchez es de fiar?.
Dios los cría y ellos se juntan