domingo, 19 de junio de 2016

VIII DÍA DE CAMPAÑA

No tocar. Peligro de muerte

Ayer fue el octavo día y todo sigue igual. Rajoy a lo suyo, como no podía  ser de otra manera.Ya tenemos los carteles del PP en dos paneles de la Plaza y parece que los otros dos partidos, quizás por no tener representación en la provincia, no tienen derecho a esos paneles.
Mi hija ha recibido una carta de Ciudadanos, con sonriente Albert Rivera, que no se qué dice, porque yo no abro sin permiso la correspondencia de mi hija y tampoco se la voy a mandar al RU. Pero por fuera trae el lema. "El futuro no está escrito, España será lo que queramos los españoles". Tiene mucha razón, el futuro no está escrito, lo que está escrito y muchos no lo han leído, es precisamente el pasado. Un pasado, que no se debe olvidar, ni lo bueno ni lo malo, para estar orgulloso de lo bueno y para que lo malo no se vuelva a repetir, También ha recibido otra de Podemos, que tampoco he abierto. 
Mi hijo solo ha recibido la de Podemos y como vive conmigo, la ha abierto, la ha leído, se ha reído y me la ha pasado para que también me ria. Parece que esos dos partidos van en busca del voto joven. ¿Recuerdan ustedes en la campaña del 2008, el famoso spot que se conoció como "la niña de Rajoy" y que sirvió de críticas, bromas y comentarios, sobre todo de El País?. Pues Podemos se ha inventado otra niña, algo más crecidita, que se llama Esperanza.Y escribe una carta muy sentida a sus padres desde Londres para decirle todas la coas buenas que van a hacer, por los jóvenes y las jóvenas, los ancianos y las ancianas, los enfermos y las enfermas, los estudiantes y las estudiantas, los parados y las paradas y no digo más, porque me quedo sin tinta y sin espacio.
Esperanza, perdona que te tutee. creo que tu y yo tenemos algo en común, aparte del orgullo de ser españoles, que es haber tenido la oportunidad de residir en el Reino Unido. Yo llegué allí a la misma edad que tu tienes,  para ser exacto a lo 30 año y siete meses y viví allí treinta y cuatro años. Allí vi algunos programas de Barrio Sésamo, antes de que tu lloraras por Espinete. Mejoré el inglés que escogí en el bachillerato, trabajando con italianos, aprendí su idioma y en mis viajes en coche de vacaciones a España, recordé el olvidado francés. Pasé cuatro duros años en que los extranjeros estábamos controlados por el Ministerio del  Interior y controlados por la policía. Sin solicitarlo y pasado ese periodo, me concedieron el permiso de residencia permanente en el país, con los mismos derechos que los británicos, solo que no podía votar ni formar parte de un jurado. Me casé con una británica del País de Gales, que me dio dos hijos, que se vino conmigo a España y que me dio cincuenta años de felicidad, adaptándose a lo español con la misma facilidad que yo me adapté a lo británico. Como comprenderás, Esperanza, le tengo tanto cariño a España como al Reino Unido.
Y me duele, que dos Países que crearon los Imperios más grandes del Mundo, hayan caído ahora en el punto de mira del comunismo bolivariano, del populismo  y del falso progresismo que tiene cautivada a nuestra juventud con falsas promesas imposibles de cumplir.
Volví a España hace ahora veinte años. El Reino Unido ha cambiado mucho, pero para mi es impensable que una "Member of the Parliament" fuese brutalmente asesinada en plena calle al estilo de Eduardo Dato, José Canalejas,  Cánovas del Castillo o Calvo Sotelo antes de nuestra Guerra Civil.
Ya se que detrás de Esperanza, estará la manipulación de los radicales El Coleta, El Billetero o el Gafita y que la joven Esperanza, cariñosa con sus padres, preocupada por el presente y buscando un mundo mejor, no es una chica real, es una pura quimera manipulada por los que quieren ganar España para un comunismo trasnochado, que no pudieron conseguir en 1936.
El paro juvenil en España es una triste y terrible tragedia que necesita una pronta resolución que deberían ser el objetivo principal de todos los partidos. Pero usarlo como arma electoral con falsas promesas y soluciones imposibles es francamente indecente. ¿Alguien puede creer que el comunismo crea empleo para los que lo necesitan?