¿Para cuando?. Ya empezó el 11 de Setiembre del 2001 cuando los yihadistas de Al Qaeda destruyeron las Torres Gemelas de Nueva York con el resultado de 3,000 muertos y 6,000 heridos. Provocó el ataque a Irak hasta la captura de Sadam Husein y el hipotético final de Al Qaeda y Obama Bin Laden. Pero no el final de yihadismo islamita, que mantiene el enfrentamiento de Oriente contra Occidente.
Se demostró con el ataque del 11 de Marzo del 2004 en Madrid con la muerte de 192 persona y unos mil heridos, con las consecuencias por todos conocidas y la disculpa de la intervención de España en la guerra de Irak, cuando los tropas españolas llegaron el país cuando ya la guerra había terminado.
Desde entonces ha habido una serie continua de ataques y atentados que podemos recordar como los siguientes:
1 de Septiembre 2004 en Rusia con 330 muertos casi todos niños.
14 de Febrero 2005 en Líbano con 21 muertos y 100 herido. Se salvaron numerosos españoles, entre ellos Esperanza Aguirre que hizo famosos sus prestados calcetines blancos.
7 de Julio 2005 en Londres con 56 muertos y 700 heridos.
16 de Mayo 2006 en Marruecos con 45 muertos y casi 100 heridos.
Un total de 3644 inocentes víctimas asesinadas y de casi 8,000 heridos.
Se han producido una serie de ataques incluyendo el derribo de varios aviones de pasajeros, de dudosa y difícil aclaración y autoría en los que han muerto casi otros millar de inocentes víctimas.
La gota que ha hecho rebosar el vaso de la paciencia ha sido el ataque en todo regla perpetrado en París. El Presidente Hollande ha reaccionado de inmediato y no ha dudado en bombardear el cuartel general de los yihadistas.
Hemos entrado en una guerra muy peculiar, en la que se han producido ataques inesperados e indiscriminados contra civiles inocentes y no de soldado a soldado y de trinchera a trinchera cada uno con sus armas. A esta escala llegaremos al punto de que se destruyan ciudades enteras y sus habitantes, hombres, mujeres y niños inocentes, mientras los soldados modernos, sin uniformes, cascos ni fusiles, sentados frente a un ordenador, simplemente aprieten un botoncito del teclado, que posiblemente esté pintado de rojo.
Y todavía hay políticos, como el Coleta que consideran la defensa como venganza. Parece mentira que haya reclutado en sus filas a un ex general, que en otros tiempos habría sido declarado, al menos en rebeldía, si no en alta traición. Ya no recordamos nuestra Guerra incivil con la lucha cara a cara de españoles contra españoles, que según José María Gironella nos costó "Un millón de muertos". Una guerra que, según decían los críticos la ganaron tres hombres claves. Franco que ponía los soldados, Juan Mars que ponía el dinero y Pedro Domeq que ponía el brandy de Jerez.
La situación no es para bromas pero, al menos, tenemos el acuerdo de los partidos, Popular, Socialista y Ciudadanos, de luchar juntos por nuestra libertad y nuestra unidad contra el enemigo de dentro y de fuera. Izquierda Unida parece que no se ha pronunciado, aunque lo de la unión lo lleven en el nombre y Podemos no está por el apoyo. Mejor para todos que ya se vaya significando.
De nuestros vecinos franceses podemos aprender otra lección. Cantar nuestro Himno Nacional, con la letra de Marquina, de Pemán o del último (cuyo nombre no recuerdo) que la ha publicado en Internet y a la muchos les hemo dado el visto bueno. Creo que la más acertada es la original de Pemán del año 1928, que habla de nuestras glorias y no ofende a nadie.
De nuestros vecinos franceses podemos aprender otra lección. Cantar nuestro Himno Nacional, con la letra de Marquina, de Pemán o del último (cuyo nombre no recuerdo) que la ha publicado en Internet y a la muchos les hemo dado el visto bueno. Creo que la más acertada es la original de Pemán del año 1928, que habla de nuestras glorias y no ofende a nadie.
