miércoles, 11 de agosto de 2010

MEMORIAS VARIAS II





Ayer fue 10 de agosto. No creo que este día sea muy relevante para los españoles, pero si lo es para los que tenemos algunos años, somos de Higuera de la Sierra y todavía no hemos perdido la memoria. Ayer hizo 74 años del asalto a la Casa Cuartel de la Guardia Civil en nuestro pueblo.
Yo tenía cuatro años y recuerdo oír los tiros y las explosiones desde mi casa.No tengo ni idea si gente del pueblo estuvo involucrada en el asalto. Mi padre nunca me dio nombres de los rojos de Higuera o de sus fechorías, por lo que estoy seguro que crecí sin odio ni rencor a ningún paisano y con amigos, hijos de algunos de ellos, que siguen siendolo. Fueron mineros de Nerva a las órdenes de Antonio Molina Vázquez, que con su lugarteniente Antonio Guerrero González, conocido como "El Sastre", habían formado una columna que ya habían asaltado el Cuartel del Castillo de la Guardas con la idea de apoderarse de armamento, del que andaban escaso, aunque tuvieran amplio arsenal de explosivos robados en las minas. El tal Molina debía ser un buen elemento, pues a la sazón contaba solo 26 años.
El resultado del asalto ya lo he narrado anteriormente. Solo queda recordarlo como homenaje a aquellos Guardias Civiles que dieron su vida "Por Dios y por la Patria" defendiendo el cuartel contra una fuerzas varias veces superiores que terminaron con seis de ellos y destruyeron el Cuartel.
El azulejo lo recuerda y aunque el azulejo desapareció en los tiempos de Roldán, los higuerenses debemos recordar esa gesta gloriosa de unos hombres con honor y mal pagados, que dieron sus vidas defendiendo su cuartel. Si actualmente la Guardia Civil es el cuerpo peor retribuido de todas las fuerza de seguridad, ya podemos imaginarnos cómo sería en el año 36.
Cinco días más tarde las tropas nacionales tomaban Higuera y los secuaces de Molina huyeron derrotados, hasta abandonando, para poder correr más rápido, alguno de los fusiles que habían conseguido en su asalto al cuartel.
Paradojas de la vida, la noticia de ayer. El Presidente de la Diputación de Málaga, se pelea con dos guardias civiles por no cuadrarse ante él. Yo creo que él debería, si no cuadrarse, al menos saludar a la Guardia Civil con el respeto que se merece. Pero está claro. ¿Que se puede esperar de un socialista que encima se apellida Pendón? Solo que haga honor a su nombre.