Esta mañana he recibido la visita del grupo socialista de candidatos a la alcaldía. Por supuesto no han venido a pedirme el voto por dos razones. Primero porque la campaña no empieza hasta las doce de la noche del viernes y segundo porque me conocen lo suficiente para saber que no les voy a votar.
Me han dejado un folleto y una invitación para asistir al acto de presentación de la candidatura el próximo viernes en el salón de "La Pasión". Les he dicho que seguramente asistiré, ya que de momento tenía la tarde libre. Después me he acordado de que ese mismo día también me habían invitado al mismo acto del Grupo Independiente. He decidido aceptar la invitación de los socialistas. Ni mucho menos para hacerle un feo a los Independientes con los que me une la buena armonía que tienen con mi partido, sino porque tengo curiosidad por saber qué ofrecen en su programa. Desde hace muchos años, he tenido la costumbre de enterarme de lo que dicen, ofrecen, prometen o pretenden los adversarios políticos. Por supuesto no van a cambiar mi intención de voto, pero es bueno saber si en algo podemos coincidir.
Sobre todo tengo mucha curiosidad por saber de este nuevo y joven grupo, esperando que no sean como los anteriores. Soy de la opinión de que los dos grandes partidos españoles están para la misión de gobernar en España sin "acritud" y con una alternancia indispensable en una nación democrática, como ocurre en los países más avanzados, como Estados Unidos o el Reino Unido.
¿No les parece bonito eso de "unidos"?. Ya va siendo hora de dejar atrás aquel slogan de "Spain is differente", cuya intención fue solo el atraer a los turistas para que conocieran la diversidad de nuestro país, sus ciudades, sus monumentos, sus montañas y sus costas. El bipartidismo puede funcionar perfectamente siempre que ambos partidos estén solamente separados por una amplia mayoría que representa el centro. Así de claro, centrados y sin extremismos.
Comenzamos nuestra democracia por el buen camino hasta que con la llegada de Zapatero, el partido se escoró a babor alejándose del centro. Ahora han surgido demasiados partidos, que están poniendo en peligro nuestro futuro y haciendo indispensable, que tanto mi Partido como el Socialista, se regeneren, se entiendan, colaboren y se olviden para siempre de la consigna de Zapatero de "Todos contra al P.P."
Les he asegurado a mis visitantes de esta mañana, que no me voy a meter con ellos. Pero si voy a hacerlo con el Partido en general por la trayectoria que ha tomado en los últimos tiempos. Son gente nueva a la que hay que darle una oportunidad para que demuestren que quieren un socialismo nuevo.
Espero que se olviden de revanchismo y que los que alcancen un puesto en el ayuntamiento no se dediquen a "luchar contra el enemigo" sino a trabajar por nuestro pueblo y en beneficio de los que les voten y de los que no les votemos. Higuera de la Sierra no se merece estar dividida, enfrentada, separada o distanciada por ideas políticas. Tenemos muchas cosas en común y son muchas las que nos unen y pocas las que nos separan.
