miércoles, 30 de mayo de 2018

LA MOCIÓN DE CENSURA DE HOY

La moción de censura presentada por Pedro Sánchez contra Rajoy que debía comenzar a debatirse mañana para votarse el viernes, ha comenzado hace dos horas con la sesión de control al Gobierno. Da la impresión de que la oposición tiene demasiada prisa.
Como viene ocurriendo desde hace algún tiempo, hoy se ha vuelto a convertirse un gran circo, donde no han faltado los payasos, los malabaristas y los magos.
El más aplaudido (por la izquierda y por él mismo) ha sido la pregunta de Pablo Iglesias al Ministro de Interior, sobre la retirada de una condecoración a Billy el Niño. Y usted dirá: ¿A Robert Taylor por encarnar el personaje de la película de 1941?. Pues no. Se trata de José Antonio González Pacheco, ex inspector de 1ª Clase del Cuerpo Nacional de Policía (franquista), concedida por el Gobierno de España en 1977. (transición).
Basado en la Ley de la Memoria Histórica (zapaterista) la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica ha pedido que se retire la Medalla de Plata del Mérito Policial y por supuesto la remuneración que esta conlleva, al policía tachado de cruel torturador. El malabarista  Pablo Sánchez ha convocado a un grupo de presuntas víctimas de las horribles posibles torturas del policia, que desde la tribuna de invitados han hecho de clan del artista, aplaudiendo y levantando el puño, que le han hecho llorar de emoción.
También el payaso Rufián ha mantenido un rifirrafe con el Presidente de Gobierno al que ha pedido que dimita y ha retado al PSOE a que no se fíe de sus barones que dicen estar mejor con "ladrones, carceleros, corruptos y mentiroso".
Margarita Robles, la portavoz del Partido Socialista, que sustituye en el hemiciclo a su jefe Sánchez., abrió la sesión de preguntas con los conocidos ataques al Presidente (que carece de credibilidad y ha faltado a la verdad en los tribunales de justicia) que ha tenido que recordarle el afán de su Secretario General de intentar llegar a la presidencia por cualquier procedimiento que  no sea por el voto de los electores, ya que cada vez que hay elecciones, su partido pierde votos.
La Presidenta del Parlamento ha tenido que intervenir muchas veces llamando la atención a varios de los intervinientes, por salidas de tono o de tema, y pedir silencio a sus señorías. A mi me ha recordado las sesiones parlamentarias de los últimos años de la II República, que ya saben como terminó. Fue durante los primeros cuatro años de mi vida, y tengo algunos recuerdos puntual y muy personales, pero creo que he leído lo suficiente, de varias y distintas procedencias, para tener una idea cierta en lo que pasaba en aquellos años. Por eso temo que la historia se repita. Está claro que somos el único animal que tropieza dos veces en la mismo piedra. Tres veces sería demasiado.
Si le gusta el circo, no se pierdan el debate de la moción mañana.