Ayer se inauguró en Albacete el I Congreso Internacional de la Tauromaquia como Patrimonio Cultural. La Presidenta de Castilla la Mancha, María Dolores de Cospedal y el Ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, fueron los encargados de la apertura del Congreso que se extenderá a hoy y mañana y cuya presidencia de honor la ostenta Su Majestad el Rey Don Juan Carlos, gran aficionado y defensor de la Fiesta Nacional. Afición heredada de su madre Doña Mercedes, que asistía a las corridas hasta en silla de ruedas. Y si no me creen, pregunten a Curro Romero.
Este congreso ha despertado interés internacional y asistirán 29 ponentes de ocho países entre los que hay creadores, intelectuales, profesionales, expertos, periodistas y políticos. Terminará mañana domingo con un festival benéfico con la actuación del rejoneador Diego Ventura y los toreros Enrique Ponce, El "Juli", David Fandila, Miguel Ángel Perera y el novillero José Garrido. Los beneficios irán a Cáritas y a la Institución El Cotolengo.
Llega este I Congreso en una situación clave para la Fiesta, cuando Barcelona y San Sebastián han prohibido las corridas de toros (¿será por lo de Fiesta Nacional?), los movimientos antitaurinos van tomando fuerza y existe un malestar entre los profesionales que crea problemas en eventos tan importantes, como la Feria de Sevillla.
Una cosa que nunca entenderé es como en el sector antitaurino hay activistas radicales que a su vez van a favor del aborto libre. ¿Vale más la vida de un animal noble y bravo, nacido para morir luchando, que la de un ser humano indefenso que no tiene oportunidad de nacer?. No tiene sentido.
En el citado programa no solo se habló de toros, sino también de política y ¿como nó?, de Podemos. ¿Irán en contra de las corridas para atraer el voto de los descontentos con ellas?. Pues no lo se. Lo que si se, es que su Venezuela querida se ha adherido al Congreso, que allí se celebran corridas y hay toreros y aficionados y posiblemente hubo algún antepasado mio que dio origen a los famosos hermanos Girón, César, Curro, Rafael y Efraín, que hicieron buenas temporadas en España.
No puedo más que recordar a mis paisanos, que desgraciadamente, el Festival benéfico que comenzó mi primo el Cura Girón, hace cuarenta y cinco años, parece que ha llegado a su fin. El costo ha superado la recaudación y, aunque Domingo Moya he hecho todos los esfuerzos posibles, desde que se hizo cargo de la organización después del fallecimiento del Cura, ha llegado un momento en que la celebración se hace imposible. El Hogar Virgen del Prado y la Asociación Cabalgata de Reyes Magos se quedarán sin las modestas ayudas de estos últimos años e Higuera perderá el Festival de la Sierra, por el que han pasado desinteresadamente
tantas figuras del toreo y las reses de muchos ganaderos. Desde aquí mi más sincero agradecimiento a todos los que han colaborado durante años a tan magnifica obra.
