martes, 4 de agosto de 2015

MAS

No me refiero a la cadena de supermercados, ni a la televisión de Huelva donde daban noticias de mi pueblo y Prudencio Cortes y Tamara Benitez entrevistaban a nuestra gente y nos visitaban con relativa frecuencia. Me refiero Don Arturo, que así constaba en el Registro Civil desde su nacimiento en 1956 hasta que lo cambió por Artur en el 2000. Está claro. 44 años español y solo 15 años catalán de pura cepa.
Pues bueno, Don Arturo, que yo no hablo ni escribo catalán ni falta que me hace ya que las varias veces que he estado en Barcelona, tampoco me ha hecho falta, firmó ayer "con nocturnidad", yo diría también "con alevosía y mala leche", el decreto convocando las elecciones autonómicas, que oficialmente serían el año que viene.
Y ya van tres y falta otra.
El año 2015 pasará a la historia como el AEPA. (Año Electoral Por Antonomasia, según mi amigo Gracián). ¿Cuanto dinero nos costará a todos los españoles entre propaganda, papeletas, sobres, presidentes de mesas, interventores, vigilancia de la Guardia Civil y otros gastos?.
Gracián dice que "alevosía" quiere decir el engaño que pretende al convertir unas simples y adelantadas elecciones autonómicas en un plebiscito sobre la imposible independencia de Cataluña y "mala leche", el cabreo que tiene porque, como decía el Guerra, "Lo que no pue sé, no pue sé y ademá es imposible".
España es UNA desde que hace 523 años Isabel y Fernando reconquistaron Granada y dieron comienzo al Imperio Español del que todos deberíamos estar orgullosos. Cuando 27 naciones de Europa, tan lejanas y diferentes como Portugal y Lituania o Grecia e Irlanda se unen para formar una Unión Europea, parce cosa de descerebrados inconscientes el querer separase y seguir "por su cuenta". Los españoles catalanes y los muchos que españoles que no son catalanes, no se lo merecen.
Nunca podré entender, que políticos que han jurado, o el menos prometido aunque sea por "imperativo legal", cumplir y hacer cumplir la Constitución, no hayan leído el articulo 155. Pues deberían leerlo para que cuando el Gobierno lo aplique, como es su obligación, no les coja de sorpresa.
Siempre he creído que las Autonomías fue un error de entrada, que se ha confirmado al cabo de los años. ¿Por qué tenemos los andaluces que pagar más o menos impuestos, tener mejor educación, sanidad, servicios o ayudas, que los gallegos, madrileños, catalanes o valencianos.? ¿No somos todos iguales ante la Ley?. Pues no. Porque cada autonomía tiene sus propias leyes que pueden ser distintas de las demás. Sería imposible dar marcha atrás, pero deberíamos procurar que funcionen mejor y más unidas. Al fin y al cabo, las Leyes las dicta la Unión Europea.