domingo, 21 de mayo de 2017

¡QUE VIENE EL COCO!

Así asustaban la madres en mi juventud (ya hace muchos años) a los niños traviesos o díscolos. Había otras versiones como el "tío del saco", el "sacamantecas", el "comeniños" y en la costa del sur de Inglaterra "the spainers" los soldados españoles de la Armada  Invencible que asolaba la costas de Devon y Cornwall.
 Al coco que me refiero si se le ve la cara.  No hay un día en que no le veamos en los medios. Alfonso Guerra decía aquello de "el que se mueva no sale en la foto". Pues este se mueve mucho y sigue saliendo. Tiene la cara cada vez más dura y ayer movió a unos millares de personas, para hacer su peculiar campaña contra el PSOE. No contento con presentar una moción de cesura contra Rajoy, a sabiendas de que no podrá prosperar, convoca ayer una manifestación en Madrid para calentar el ambiente y marear la perdiz socialista.
Y también para asustarnos a los demás. ¿Se figura usted que Pedro gana la lucha por la Secretaría General?. Ya ha dicho que confía en Podemos para ir contra su enemigo mortal que es Rajoy. Pedro el Guapo, o Perdedor de elecciones, destructor del partido socialista, se mete en la cabeza del lobo, quiero decir del coco de la coleta, para después de cómo ha dejado a su partido, tratar de quitar de en medio a Rajoy, que cada vez le saca más ventaja en las encuestas, y volver al 1936, cuando los socialistas dejaron a España en manos del coco del comunismo.
¿Y a eso le llaman "progresismo"?. 
Eso es volver al pasado. Volver al pasado es tratar de remover los restos del que salvó a España y a Europa del brutal comunismo de Stalin. Volver al pasado es que socialista democráticos se dejen comer el coco por los nuevos comunistas de Venezuela o Irán que son los que llenan el saco (de dinero) al tío del saco (o de la coleta).
Volver al pasado es una quimera de aquellos encantadores de serpientes que se declaran demócratas hasta que alcanzan el poder y si lo consiguen, se olvidad de los engañados que le ayudaron.
Churchill decía: "La democracia es el menos malo de los sistemas políticos". Los españoles escogimos este sistema y tenemos el deber de conservarlo mirando al futuro, nunca mirando al pasado. De los tres competidores de hoy, Suana Díaz parece "la menos mala". Al menos así lo creemos y además es madre. Las madres son las que velan mejor por sus hijos.