domingo, 22 de mayo de 2016

ADIOS A NUESTRA PATRONA

Ya se nos ha ido a su casa en el Prado. Mi última petición, y supongo, que la de algunos más de mi edad, ha sido un simple: Que el año que viene pueda despedirte otra vez. 
No he estado en la Misa de Romeros, pero fui ayer a la Misa en la Residencia de Ancianos, (conviene ir coguiendo la costumbre) que resultó muy emotiva. Nuestro Párroco, José María, aunque viene de allende los mares, se ha adaptado a nuestras costumbres, aprendiendo a dar fueres y emotivos "vivas" a nuestra Patrona. Así lo hizo ayer y esta mañana frente a la ermita de San Antonio.
Me refiero a las costumbres de ahora, porque hace años, esa despedida, al igual que la llegada, se hacía en plena carretera en la Fontanilla. Hasta que un milagro de nuestra Patrona, evitó una verdadera masacre, cuando un año permitió que un camión sin frenos, se fuera a la cuneta y parara antes de coger la curva de la casa de peones camineros y arrasara a la multitud de devotos, a pie, a caballo, en mulos o burros, que recibían a Nuestra Señora. Conviene recordarlo para aquello que, partidarios de la antiguas tradiciones, son reluctante a los cambios modernos.
Ya hace algunos años que comenzó la polémica de si, trae y llevar a la Virgen, se debería hacer por el camino y no por la carretera. La carretea se ha vuelto muy peligrosa, tanto en domingo como en sábado, se necesita la valiosa y eficaz colaboración de la Guardia Civil de Tráfico y la de Protección Civil. Hace muchos años, una pareja de la Guardia Civil escoltaba a la Virgen todo el camino y la 
única Protección Civil, era la del primer caminante o el último caballista, que gritaba "Que viene un coche", según fuera desde enfrente o por detrás. Aquella carretera de ancho menor a la mitad de la actual y estrechos arcenes de tierra. Algunos caballos se salían de la carretera para evitar que se asustaran al paso de los coches. Eso podía pasar dos o tres veces durante el camino. ¿Se puede comparar con el tráfico, en número, vehículos y velocidad actual?.
Este año, como siempre las Fuerzas de Seguridad, han cumplido con su cometido y el camino ha sido seguro y sin incidente controlado por el coche y las motos de los Agentes. A las doce llegaba la Virgen a la entrada del carreterín y a la una entraba en su casa hasta el año que viene. 
Los romeros de a caballo o de carriolas, se han quedado a comer al igual que varias familia y la mayoría ha vuelto a comer a casa. La llegada de los romeros esta tarde, se espera casi desierta. Coincide con el conflictivo partido del Sevilla con el Barcelona, que se presenta  bastante politizado. Además hay bastantes bares que han decidido cerrar esta tarde-noche.
Yo añoro los viejos tiempos cuando la llevada de la Virgen se hacía el Lunes de Pentecostés a las dos de la tarde. Se llegaba al Prado a eso  de las cinco y se volvía para entrar en el pueblo todavía a la luz del día y subir a galope por la cuesta de los escalones e ir después a la casa del mayordomo que invitaba al último trago a los caballistas. Todavía a esa hora y ya de noche, los rezagados podíamos tomar unas copas en el Casino, el Chispa o el Perez. Algunas veces, Pepe Garfía (Pepe Tango, para entendernos) tenía que echarnos a la calle y  ordenar el cierre de algún bar a las doce de la  noche.
Los tiempos cambian, que es una barbaridad y hay que renovarse y adaptarse a los tiempos y sus circunstancias. Renovarse o morir, dice el refrán popular y tiene mucha razón.