viernes, 7 de julio de 2017

¿FUTURO PRESIDENTE?

¡Ni Dios que lo quiera!, que diría la Faraona, con la poca simpatía que le tendría a los socialistas que la sentaron en el banquillo. Pedro Sánchez mostró ayer una vez más su incapacidad para ser Presidente del Gobierno de España. Como guinda del pastel, amenazó al Presidente del Gobierno con "tomar la iniciativa" contra el proceso secesionista de los catalanes. Quiero puntualizar. De algunos catalanes, porque yo tengo algunos amigos catalanes y todos están en contra de la secesión y de lo políticos que se saltan la Constitución. Además tengo un apellido catalán, que quiere decir que por mis venas debe correr algo de la de mi bisabuelo que vino de Palafruguell y se casó con una andaluza. 
Sánchez, para empezar hace la cosas al revés. Si tuviera algo de sentido de Estado, debería haber visitado primero a Su Majestad el Rey y presentarle sus respetos como reelegido (todo el mundo comete errores y los militantes de socialistas también) Secretario General de su partido. A continuación al Presidente del Gobierno, porque al no ser miembro del Parlamente, debe tener una vía de contacto personal con él, a través del que se informara de los asuntos de Estado. Yo no se si esto lo exige el protocolo, pero me parece lógico.
Como los políticos están acostumbrados a saltarse la Constitución, las Leyes, las sentencias judiciales, el protocolo y la educación parlamentaria, no me sorprende que Sánchez actúe de esta manera. Ha preferido visitar primero a la oposición para asesorarse de lo que puede hacer para destruir España, como está destruyendo su propio partido. Ya le habrá dicho a unos que quiere cambiar la Constitución, a otros que quiere una España federal, al de más allá que está a favor del aborto y la eutanasia, al siguiente que le apoyará a que separe Cataluña de España y al último que quiere ser el primer presidente de la III República. Y a todos ellos, que acabará con la corrupción. ¿También con la de su Partido?.
Y después de todo esto va ver al Jefe del Estado y al Presidente del Gobierno a ofrecer su buena voluntad para solventar los problemas y retos del futuro. ¿Cómo se pueden arreglar los problemas actuales y los del futuro, con soluciones del pasado?. ¿Cometiendo los mismo errores?
La  rajoyfobia de Sánchez, el odio contra el Partido Popular y la desmedida ambición de llegar a Presidente son muy malos consejeros, para un político, que en su vida publica no ha sido ni siquiera concejal y que actualmente no es ni siquiera diputado. Exige al Presidente como aval a su posible apoyo, que dialogue con Puigdemont. ¿Cuantas veces quiere que lo intente?. Cuando uno se obstina en no escuchar y en seguir un camino, no solo equivocado, sino también ilegal, ¿Se puede uno rebajar a seguir insistiendo a sabiendas de la inutilidad del diálogo?. Pues eso es lo que pretende Sánchez para desgastar la actitud firme del que tiene la Ley y la Constitución a su favor.
Sería conveniente que Sánchez rectificara, se sosegara y tuviera algo de paciencia, para reconocer que España necesita la unidad de todos los políticos en los asuntos de Estado y que con el actual Gobierno va por buen camino. González y Aznar demostraron ayer que son dos políticos de pura raza, por muchas diferencias que puedan separarles. Zapatero se ausentó antes de que el encuentro terminara porque tenía que coger un avión. ¿Se iba de vacaciones?. No. Se iba nada menos que a Venezuela. ¿A defender a los opositores o a asesorar a Maduro? ¿A usted qué le parece?