Hoy recuerda toda España, el Gobierno, la Comunidad de Madrid, los partidos políticos, los ciudadanos en general y, sobre todo las víctimas, la terrible masacre de hace ocho años. Hay que recordar a las 192 personas que perdieron innecesariamente sus vidas y a los más de mil heridos, muchos de los cuales todavía no se han recuperado de las lesiones físicas o psíquicas. Pero no todos lo recordamos de la misma manera.
El Partido socialista lo recordará como el terrible atentado que les sirvió para alcanzar el poder, que no esperaban, manipulando la verdad, influyendo en los sentimientos de los españoles, saltándose la jornada de reflexión y culpando al Gobierno del Partido Popular por la implicación en la guerra de Irak.
Los sindicatos UGT y CC.OO, amparados por el PSOE lo recordarán como el hecho que promovió el cambio de Gobierno y les proporcionó un abundante pesebre repleto de subvenciones, ayudas y poder durante los ocho pasados años. Por eso, y de acuerdo con los que les dan de comer, han convocado, precisamente hoy, unas manifestaciones en 60 ciudades españolas, para las que podrian haber escogido otra fecha que no hiriera los sentimientos de nadie. No han querido tener en cuenta que la gran mayoría o quizás la totalidad de la víctimas, muertos y heridos, eran trabajadores a los que se supone que deben defender los sindicatos. ¿No se les cae las cara de vergüenza?.
El resto de los españoles de bien recordaremos este día como la mayor barbarie terrorista jamás perpretada en España y elevaremos una oración por la total recuperación de los heridos y el alma de los fallecidos, aunque a estos, ya les habrá recibido Dios en su Gloria. El Dios misericordioso, en el que creemos los cristianos, no creo que pueda condenar al infierno a víctimas que han sufrido ya el infierno de la barbarie terrorista, ya sea islámica o de la ETA.
Puede que algún día sepamos toda la verdad y todos los responsables puedan responder de su culpa ante los tribunales de justicia. De Justicia humana porque de la divina no se podrán escapar. De los muchos cambios que España necesita, la Justicia tiene prioridad y ya se están produciendo algunos. Lo estamos viendo ya, especialmente a lo que supone la corrupción política y especialmente en el caso que nos ocupa, han aparecido nuevos indicios, un vagón oculto o abandonado, sobre el que se va a seguir investigando. ¿Saldrá algo nuevo?. Espero que si, porque semejante crimen no debe quedar impune y todos sabemos que el caso se cerró en falso. Se encontaron muy pronto los ejecutores físicos de la masacre pero no los intelectuales, que se han ido de rositas.
José María Aznar en su comparecencia de muchas horas ante la Comisión Investigadora del caso, ya anunció que: "Estaba seguro de que si las elcciones las hubiera convocado una semana antes, el atentado habria sido también una semana antes".
