sábado, 27 de octubre de 2018

DESCANSEN EN PAZ III

El colmo de los colmos, para no dejar a los muertos dormir en paz, es la noticia de que el Ayuntamiento de El Ferrol del Caudillo ha propuesto la exhumación de los restos de la hermana de Franco que murió con solo cuatro años de edad.
Ferrol, que ya perdió lo "del Caudillo", apelativo del que se sintió muy orgulloso desde el 30 de septiembre de 1938, en que por  orden del entonces Ministro del Interior, Ramón Serrano Suñer,  mas conocido como "El Cuñadisimo", hasta el 5 de octubre de 1984. siete años después de la muerte del "dictador" que salvó a España y Europa de la dictadura comunista de Josef Stalin, quiere ahora expropiar esa tumba que acaban de ver, donde reposan los restos de la hermana, la tía y los abuelos de Franco.
Al parecer el alcalde podemista de Ferrol piensa que el cementerio pueda convertirse en un lugar de peregrinación "franquista", para visitar (o rezar) a la tumba en la que reposan los resto de los abuelos, Francico Franco y Hermenegilda Salgado, la hermana Paz Franco y la tía Hermenegilda Franco. Son demasiados Francos.
Espero que todo esto no me cueste una multa, o la cárcel, si la última pretensión de El Sin Votos, prospera y se convierte en Ley con carácter retroactivo. Me refiero a esa Ley que afectará al Código Penal, por la que insultar al Rey, quemar la bandera de España, pegar a un cura o asaltar una iglesia, salga gratis total y sin embargo gritar Arriba España, Viva Franco o apologetizar el franquismo sea un delito. Hasta aquí hemos llegado en menoscabo de la cacareada libertad de expresión. ¿Volveremos a la censura?. Pues a los primeros que hay que censurar es a los políticos que usan en el Parlamento un lenguaje barriobajero y tabernario, donde últimamente hemos oído términos como golpista, indecente, marrano, delincuente, facista, indigno o asesino. Menos mal que todavía no hemos llegado a maricón, cabrón o hijo de puta porque eso sería violencia de género, discriminación sexual o machismo.