martes, 19 de enero de 2010

CHARITY SHOPS




Ayer en el programa de Carlos Herrera oí algunos comentarios de gente que recoge artículos que encuentran junto a los contenedores de basura y que pueden ser útiles, como muebles, electrodomésticos, cuadros, ornamentos etc... que están en buenas condiciones o pueden ser restaurados con algo de maña. Me vino inmediatamente a la memoria las Charity Shops o Tiendas de Caridad que son muy populares en el Reino Unido donde todas las poblaciones, desde Londres a los pueblos más pequeños, tienen varias de las muchas que existen. En EE.UU y algunos países europeos también existen pero en España no he visto ninguna.
Son un tipo de tiendas de segunda mano donde se venden toda clase de productos donados por el público y en donde se pueden encontrar desde zapatos a aparatos electrodomésticos, pasando por libros, discos antiguos y DVD, cassette, muebles, objetos de decoración, juguetes y, sobre todo ropa desde trajes de novia a vaqueros, chalecos de punto, abrigos y todo lo que pueda imaginar. Para el público es una forma de desprenderse de todo lo que no necesita, estorba, o ya no le queda bien. Siendo los costes del negocio muy reducidos, ya que los empleados son voluntarios, muchas mujeres y algunos hombre, se pueden vender los productos a unos precios ridículos, pero que dejan una bonita cantidad para la obra benéfica a que se destina.
Estas organizaciones benéficas van desde la Red Cross hasta el Animals Care, incluyendo otras como Cancer Reserch, Oxfan, Alzaimer, Nurses, Child Care, Trinity Hospice o Salvation Army.
Este tipo de caridad bien entendida, que beneficia a las organizaciones y al público que puede encontrar verdaderas gangas a un precio muy reducido, podría ser muy atractivo en estos tiempos de crisis. Tanto como nos gusta copiar todo lo que viene de fuera, desde Papa Noel hasta la noche de Halloween, y parece que a nadie se le ha ocurrido copiar este sistema que comenzó en Londres con la primera Charity Shop perteneciente a la Red Cross a principio de los años 40s en el número 17 de New Bond Street.