martes, 24 de enero de 2012

LA CAÍDA DEL RÉGIMEN ANDALUZ

Así titulaba ABC del domingo las cuatro páginas que dedicaba a la situación actual de Andalucía. La caída en picado de un régimen que durante treinta años ha gobernado a los andaluces y ha dejado a la Comunidad Autónoma a la cola de todas en progreso, cultura, educación, trabajo, desarrollo y producción. Solo aventajamos al resto de las CC.AA en desempleo y despilfarro. Ahora es cuando debemos seguir la consigna de nuestro himno ¡Andaluces, levantaos!" y sacudirnos de encima el yugo de este régimen que ha sido el responsable de esta desgraciada situación.
El próximo 25 de marzo, tenemos la ocasión de darle a Andalucía el cambio, el vuelco necesario, para ponernos al nivel del reso de España. Por eso tanto el Partido Popular como el Partido Socialista, se están volcando sobre Andalucía, uno para sacarnos del caos y el otro para mantenerse en el poder, sea como sea. Y aquí es donde tenemos que tener cuidado.
No cabe confiar en las encuestas que dan al Partido Popular diez puntos sobre el Partido Socialista y que significa rondar la mayoría absoluta. No. Hace falta que sean las urnas y no las encuestas las que den la mayoría absoluta que permita gobernar como se está gobernando en España. Con medidas, que si se hubieran tomado hace tres años, hubieran puesto a España en bastante mejor situación que la que tenemos. Pero el gobierno socialista no quiso escuchar, ni ver, ni pensar, ni creer lo que era evidente a nivel mundial y siguió disparando con pólvora del rey. Es decir con el dinero de los contribuyentes. Ahora nos duelen las medidas económicas necesarias para sacarnos de la crisis y, hay que decir la verdad, lo que nos dolerán las medidas que afecten a los andaluces, si el Partido Popular gana las elecciones. Tenemos que olvidarnos de las diferencias de derecha o izquierda que han reinventado los socialistas y optar por un partido que sabe lo que hace con un candidato que hace lo que sabe. Javier Arenas ya fue Ministro de Trabajo y se encontró con la misma situación que ahora. Los socialistas, ¿recuerdan? decían que el PP quitaría las pensiones. Lo que no decían es que no habían dejado dinero en las arcas de la Seguridad Social para poder pagarlas. O sea, mentir para ocultar la verdad. Javier Arenas supo sacar las pensiones adelante, negociar con los sindicatos y la patronal, crear empleo y empezar a generar riqueza, hasta el punto, que de unas arcas vacías consiguió un superávit en la Seguridad Social de miles de millones. Miles de millones que los socialistas del último gobierno se dedicaron a despilfarrar, para volver otra vez a la situación, ahora bastante peor, que teníamos en 1996. La herencia venenosa que Zapatero le ha dejado a Rajoy, no es nada comparada con la que Griñan le va a dejar a Arenas. Y para salir de ella es necesario conseguir la mayoría absoluta que permita tomar las medidas absolutamente necesarias para poner a Andalucía en el lugar que se merece. En los primeros puestos del top ten de las autonomías.
Poco a poco, en precampaña y en campaña iremos dando datos y cifras, porque saldrán muchas a relucir. Con 1,232,900 parados en Andalucía, que sobrepasa el 30%, la Junta del Sr. Griñan sigue repartiendo dinero, que no tiene para pagar a proevedores, en subvenciones a sindicatos y asociaciones amigas, de Andalucía y de países extranjeros. Sería curioso repasar todos los BOJA de hace tres años y coger una calculadora para sumar la columna de las cantidades y llevarnos una desagradable sorpresa. La última relación que yo he visto, creo que es del BOJA del 22 de diciembre pasado, comienza con las dos concedidas a UGT y CC.OO de Andalucía de 200,000 euros a cada una. ¿Para crear empleo?, No. Para comprar votos con vistas al 25-M. Una prueba más de que volvemos a la España anterior a la Guerra Civil, cuando los caciques de los pueblos compraban los votos a los trabajadores a duro por papeleta. La única diferencia es que lo hacían con su dinero y ahora lo hacen con el dinero de los demás. Y a bastante más que a duro la papeleta.