Ayer Domingo, día de descanso, a menos para los políticos que pasarían la jornada preparando en debate de esta tarde. Parece que el personal no está muy interesado. Está jarto de los políticos que nos han hecho perder un tiempo, imposible de recuperar.
Y hablando, o escribiendo, de tiempo, mi amigo Gracián suele decir que hay dos maneras de medirlo "Patras o palante" es decir, mirando al pasado o mirando al futuro. Y se refiere con esto a que yo estoy contando lo días que van pasando de campaña electoral, pero Pedro Sánchez está cotando lo días que le quedan de vida política. Y según Gracián son catorce. Hasta la noche del día de las elecciones, cuando conozca el resultado de las mismas y el rotundo fracaso de su Partido.
Al menos, eso es lo que dicen las encuestas. Claro que se equivocan, tanto como los votantes. Recuerden qué pasó el 14 de Marzo del 2004, cuando, contra todo pronóstico el PSOE ganó al PP y le dio la Presidencia a José Luis Rodríguez Zapatero. Y hay que recordarlo para que ahora no pase igual. Ya tuvimos siete año de desgracia y España no está para aventuras de alto riesgo.
O de altísimo riesgo, porque si los votantes del Partido Socialistas, descontentos, desilusionados, cabreados o centrados, e van a Podemos, podemos estar en el riesgo de volver al mismo Frente Popular, que nos llevó a la Guerra Civil. No quiero ser pesimista, pero si la izquierda centrada del PSOE, IU, Nacionalistas y Podemos se unen contra el Partido Popular, llegaremos con toda seguridad a la situación que ya estamos viendo en donde gobiernan los radicales del populismo. Y no solo me refiero a Venezuela o Grecia, sino a los sitios más cercanos como Madrid, Barcelona, Zaragoza, Valencia o Cádiz.
Pues la cosa está muy clara, si a usted no le gusta ver las estanterías de Hipercor, Mercadona, Carrefour, Covirán o Díaz sin nada que vender, no lo piense dos veces.
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