No creo que podemada esté en el nuevo diccionario de la RAE, al menos no está en el diccionario corrector de mi ordenador, pero hoy la voy a incorporar, porque creo que se va usar bastante. Como usted podrá figurarse, significa simplemente "cosas que hace Podemos"
La última la acabo de ver en Twitter y usted la ha visto ahí arriba. No tiene desperdicio y ha merecido montones de comentarios a favor y en contra, como siempre, que no he terminado de leer porque no me gusta perder el tiempo leyendo chorradas.
Como El Coleta y compañía no tienen representación en el Parlamente y ojalá no la tengan o, al menos que sea poquita, se dedican a usar las redes sociales para todo lo que se les ocurre. La reforma de la Constitución es usada por todos aquellos que quieren mal a España. O sea, por los que quieren quitar la Religión de las escuelas, los signos religiosos, olvidar la época franquista, imponer su memoria histórica ,acabar con la Monarquía, hacer un Estado Federal, permitir la división de España etc..etc..
¿Es que la que tenemos no sirve? Pues si no sirve, se puede cambiar. Pero si se cambia, se debe cambiar para mejorarla y hasta ahora no he oído ni una sola propuesta que la mejore. Al contrario.
No se si usted sabe que la primera Constitución editada, lleva el escudo de España en su portada. Si señor, el escudo de entonces, ese que ahora llaman franquista, del águila o anticonstitucional, cuando no puede ser "anti" porque cuando se adoptó no había Constitución. La segunda edición ya llevaba el Escudo de su Majestad el Rey Juan Carlos, el mismo que lleva nuestra bandera, que ahora lleva el del Rey Felipe VI. También sin el águila, que llevaba el de los Reyes Católicos como signo imperial del Gran Imperio que fuimos y ya no lo somos, pero del que debemos sentirnos orgullosos.
No se si El Coleta y compañía han leído la Constitución, pero los cinco cambios propuestos ya están contemplados. Si acaso se podrían matizar o mejorar, para lo que sería necesario el consenso de los dos grandes partidos, ya que sería necesario las tres cuartas partes de los votos de la Cámara. Eso solo se podría hacer si el Partido Socialista colabora junto con el Partido Popular, cosa que veo bastante remota, mientras el segundo Zapatero, que se llama Sánchez, se considere el enemigo número uno de su adversario político. Cosa que parece imposible porque cada día se aparta más del centro y se acerca más a la izquierda más radical. Dios los cría y ellos se juntan.
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