DESERTORES POLÍICOS

Ha habido, hay, y posiblemente, habrá, muchos y de todas formaciones políticas. Y los hay de dos principales clases: los que desertan por no estar de acuerdo con la actuación de su partido y se dedican a su profesión, olvidándose de la política y los descontentos que se van a competir con su partido fundando otros de ideología parecida, con diferentes matices. Esos que prefieren ser cabeza de ratón, antes que cola de león y no se dan cuenta de que puede venir el gato y merendarse al ratón.

Así tuvimos, en mi partido, el caso del magnífico secretario general, Francisco Álvarez Cascos, a quién cariñosamente llamábamos El Cerrojo, por sus iniciales FAC. Después de una buena actuación como diputado, senador, vicepresidente del gobierno y ministro de Fomento, dejó el partido en enero de 2011, por "discrepancia con la dirección general" . Fundó Foro Asturias y consiguió la presidencia del Principado de Asturias en las elecciones autonómicas de ese mismo año. Duró solo diez meses y se vio obligado a convocar elecciones anticipadas, de las que salió presidente el candidato de PSOE, ayudado or IU y UPyD.  Desde entonce es secretario general de FAC, Foro Asturias Ciudadanos, que coincide con sus iniciales, en la oposición.

Otro caso fue el de Alejo Vidal-Quadras, que fue presidente del Partido Popular de Cataluña hasta 1996 y eurodiputado y vicepresidente del Parlamento Europeo hasta enero de 2014 en que anunció su salida del Partido Popular por discrepancia con Rajoy para presentarse como cabeza de lista a las elecciones europeas del 25 de mayo  por el  nuevo partido VOX que no consiguió ningún escaño. El pasado Febrero comunicó su baja por haber sido desautorizado por abogar por el acercamiento de VOX a Ciudadanos y UPyD. Una lástima porque ambos son de derecha y bueno y experimentados políticos.

En el Partido Socialista fue notoria la salida de Rosa Díez en el 2007, después de haber sido diputada foral de Vizcaya, parlamentaria del Parlamento Vasco, consejera del Gobierno Vasco y europarlamentaria, para fundar Unión Progreso y Democracia y conseguir un escaño en las elecciones generales del 2008, a las que su partido se presentó como un reto al PSOE y al PP, ofreciendo la regeneración política y la reforma de la Ley Electoral y la Constitución. En las Generales del 2011 consiguió cinco diputados, en las municipales y autonómicas su partido ha sido un  verdadero fracaso y ya ha anunciado que no se presentará a la Genrales del 20 de Diciembre.

También en UPyD ha habido desertores. Irene Lozano, se ha pasado al PSOE, habiendo sido Diputada de UPyD desde el 13 de Diciembre del 2011 hasta hace hoy dos días, que ha presentado su baja, después de perder el pasado Julio las primarias para ser líder de su partido. Tiene una larga carrera profesional como periodista y escritora, pero no muy larga como política.

A pesar de eso, el indeciso e impredictible Pedro Sánchez le ha ofrecido el puesto número cuatro en la lista del PSOE por Madrid, ante el descontento o el cabreo de muchos aspirantes del Partido que llevan años esperando un puesto con probabilidades de salir elegidos. Aunque el Partido esté a la baja en estima y a la alta en pérdida de votos, el número cuatro de Madrid tiene el puesto asegurado. ¿Nos podemos  fiar de un partido socialista que cada vez se escora más a babor y pacta con la izquierda más radical con tal de no hacerlo con el popular?. 

 ¿Qué le pasa a Pedro Sánchez?. ¿No tiene gente de confianza?. Yo no me fiaría un pelo de lo desertores o tránsfugas de otros partidos. No recuerdo que haya habido ninguno que haya triunfado. Pedro Sánchez debe estar muy preocupado con la súbita amistad o entendimiento entre Susana Díaz, su principal adversario y Zapatero, que quiere demostrar que él fue mejor político que Sánchez. O sea, que con Sánchez el Partido Socialista va de mal en peor y quizás Susana sea la salvación. Al menos no la pueden acusar de pactar con la extrema izquierda. Lo ha hecho con un partido que se califica de centro derecha, mientras Sánchez lo ha hecho con "quién sea", con tal de fastidiar al Partido Popular, a España y a los españoles. La difícil posición del Partido Socialista es su problema.
Pero el problema para España, es que se necesita un partido de derecha moderada, como es el Partido Popular, otro de izquierda moderada como debería ser el PSOE, capaces de entenderse y ayudarse en situaciones difíciles, como cuando no hubiera mayoría absoluta de uno de ellos y quizá un tercero también moderado, que 
pudiera ayudar al más votado. Las nuevas aventuras no consiguen la estabilidad necesaria para un Gobierno sólido y creíble que necesitamos. Para mi el Centro son la gran mayoría de los ciudadanos que no pertenecen a ningún partido, que votan al que lo está haciendo bien y al contrario cuando uno lo está haciendo mal. El 20 de Diciembre debemos decidir, por el bien de España, no permitir un paso atrás, sino continuar con quién lo está haciendo bien.

Pareja peligrosa para Pedro Sánchez