Ese fue el abrazo ayer de Carles Puigdemont a Artur Mas, cuando fue elegido Presidente de la Generalitat. Según la versión catalana, el abrazo del oso es una demostración que pretende ser de afecto y cariño, pero encierra una dura trampa. No hay más que ver la mirada en la foto de portada de ABC. El ex alcalde de Girona, que no es el femenino de mi apellido, ya es "El Mes Honorable President", el mismo título que daban a Jordi Pujol. ¿Terminará igual?. Nunca se sabe, pero ya ha aparecido en Facebook, una noticia asegurando que mientras fue alcalde, gastó 3,7 millones de euros o 615 millones de pelas. en compar obras de arte con cargo al presupuesto de electricidad.¿Será verdad o será una de esas noticias de tirar la piedra y esconder la mano?. Pues allá la Justicia que según ellos, será la Justicia Catalana y no la Española.
El nuevo Presidente ha lanzado un "Visca catalunya lliure".
El Presidente del Gobierno ha dicho: "No dejaré pasar ni una sola actuación que vaya contra la Ley".
Y ahora, ¿qué?. ¿El artículo 155 de la Constitución como quieren algunos?. Pues vean lo que dice:
Artículo 155
- Si una Comunidad Autónoma no cumpliere las obligaciones que la Constitución u otras leyes le impongan, o actuare de forma que atente gravemente al interés general de España, el Gobierno, previo requerimiento al Presidente de la Comunidad Autónoma y, en el caso de no ser atendido, con la aprobación por mayoría absoluta del Senado, podrá adoptar las medidas necesarias para obligar a aquélla al cumplimiento forzoso de dichas obligaciones o para la protección del mencionado interés general.
¿Les queda claro?. Pues vamos a dejar que el Presidente en funciones haga lo que tiene que hacer. Que el juró el cargo y por lo tanto, siendo hombre de palabra, cumplirá con la ley, como es su obligación y hará que se cumpla. Claro que sería más conveniente que el señor Sánchez rectificara, que es de sabios, y no siguiera empeñado en el no, que es de ignorantes tozudos. Si Rajoy preside el Gobierno con el apoyo del PSOE y Ciudadanos., sería la mayor garantía para la unidad de España.
El órdago de independencia que se lanzó anoche por el nuevo Presidente, ya tiene una respuesta contundente de los tres partidos más votados por los españoles, aunque Sánchez todavía titubea, pero ese es su problema. Susana Díaz, que sabe nadar y guardar la ropa, ya se adelantó anoche a respaldar al Gobierno en funciones. El resto de los barones tienen la palabra y, por lo que últimamente he visto y oído en los debates televisivos, todos están de acuerdo en un pacto, acuerdo o coalición de los tres partidos para que gobierne la lista más votada, como siempre ha sido y debe de ser. El que no acepte la mano que Rajoy ha tendido, que no se queje después si se ahoga en las aguas revueltas de los diversos grupos podemistas.