Aunque hoy es día de fiesta por el Día de Andalucía, el día verdadero fue ayer. Ayer su cumplieron 30 años de Autonomía. Treinta años de dictadura socialista y treinta años perdidos en progreso. Precisamente en progreso, aunque los socialistas se autoproclaman precisamente eso:Progresistas.
El suplemento especial de ABC dedicado a Andalucia presenta las respuestas de varias y diferentes personalidades sobre como evalúan estos treinta años y, desde los 12 puntos que le da Miguel Rodriguez Piñero (tampoco hay que exagerar cuando la nota máxima siempre ha sido un diez) al 0 que les da Joaquín Moackel, hay de todo. Pero la media no pasa de un aprobado entre el 5 y el 6. Tiene gracia la nota de Joaquín Sanchez Ugena, Presidente de la Sección I de la Audiencia de Sevilla, que dice que le daría un 0 pero como la Junta considera humillante el 0 en la Universidad, (así van los estudiantes) le da un 1.
Yo por supuesto le daría a la Junta un buen 0 en progreso. En treinta años nos hemos quedado los últimos de la cola en educación, sanidad, infraestructuras, innovación y desarrollo, pero los primeros de la lista en desempleo. Pero tengo que confesar que si se merece un sobresaliente en creación de votos agradecidos. Quiero decir puestos de trabajo y empresas. Leo que la Junta empezó con cuarenta personas y hoy agrupa a 248,438 empleados y 146 empresas propiedad o participadas por la Junta que si no recibieran fondos públicos, perdería más de mil millones de euros. ¿Cuantos votos significan los empleados directos e indirectos y sus familiares? Está claro que la Junta es una máquina de comprar votos con el dinero de todos. ¿Se acuerda usted de los caciques que compraban votos por un duro? Pues mejor no calcular los duros que nos cuesta ahora. Claro que los caciques de entonces lo pagaban de sus bolsillos y la Junta con el dinero de todos, porque ya se sabe que los socialistas son expertos en gastar el dinero público y echarle la culpa a la derecha que es la que pone la economía en orden. O sea, que Andalucía necesita un cambio YA.
Si en mi pueblo, después de veinte años de ayuntamiento socialista, hemos sido capaces de cambiar, confío que el resto de los andaluces salgan del letargo en que les tienen sumergidos y sean capaces de hacer lo mismo. Andalucía lo merece, lo necesita y puede hacerlo. El lema de nuestro escudo ANDALUCIA POR SI PARA ESPAÑA Y LA HUMANIDAD, no lo hemos cumplido, ¿será demasiado tarde?. Nunca es tarde si hay voluntad.