PERSONAJES ILUSTRES

Nuestro Ayuntamiento ha tenido la muy buena idea de incluir en su página web una relación de personajes ilustres de nuestro pueblo con una corta biografía suficiente para que los visitantes, cada vez más numerosos, sepan quienes fueron cuando pasen por las calles que llevan sus nombres. No hace falta mencionarlos porque los pueden ver en el siguiente enlace:
 http://www.higueradelasierra.es/es/disfruta-higuera/personajes-ilustres/.

Todos tienen calle dedicada para ser recordado, menos uno. Sin la menor duda el más internacional de todos, el que más tiene escrito en papel y en internet, así como en el memoria de muchos españoles. Prueba evidente es que Hugh Thomas en su "The Spanish Civil War", quizás la más  completa y documentada obra sobre nuestra Guerra Civil, que está en todas las Universidades de lengua inglesa y también en muchas de lengua española, lo menciona en 15 páginas. Los artículos, documentos, cartas y libros sobre su vida en España y en el extranjero son incontables y su archivo personal, creo que actualmente bajo la custodia de uno de sus nietos, debería hacerse público para su estudio y por lo que pueda aportar a la verdadera memoria histórica. Sería necesario porque, en los escritos que he podido leer en internet, hay bastante discrepancia que no da una real visión de su vida y hechos. 

Manuel Fal Conde y su esposa María una
de sus últimas fotos 

Supongo que muchos de mis habituales lectores sabrán ya que me refiero a Manuel Fal Conde. No voy a contarles su vida pública, que todos conocéis o podeis conocer, sino mi personal experiencia del hombre, a quien conocíamos familiarmente como "tío Pepe", con quién tuve el honor de hablar hasta de política. Siempre recordaré nuestro último encuentro en la llamada casa de Tía Cástula el verano último que pasé en el pueblo antes de irme al Reino Unido. Ya retirado de la política y superada una operación de garganta, por la que tuvo necesidad de aprender a hablar de nuevo, me mencionó, que a pesar de sus discrepancia con Franco, que casi le cuesta la vida, porque pudo evitar una emboscada que le habían tendido en una carretera al cambiar el itinerario previsto, de su deportación a Portugal, de su vigilancia policial a su vuelta a Sevilla y hasta en su veraneo en la casa de Higuera, de la censura de su correspondencia y el control de sus movimientos, respetaba a Franco por haber vencido al comunismo, pero "cuando muriera le gustaría que volviera su Rey Carlista". Siempre leal a su causa.

En el salón de los bajos de la terraza de la casa de Tía Cástula en la que con sus hijos solíamos jugar el ping-pong, había una placa metálica esmaltada en azul con su nombre en letras blancas, recuerdo de la calle que había tenido dedicada y que se había quitado con motivo de sus discrepancias con Franco y su negativa a la Unificación del Requeté y la Falange para ser un único partido bajo el nombre de Falange Española, Tradicionalista y de la JONS.

Cuando volví del Reino Unido en 1996 y fui elegido concejal, tuve la ocasión de presentar una petición, avalada por las firmas de muchos vecinos, para que se restituyera el nombre a la calle. La respuesta del grupo socialista fue que "No querían poner calles a los políticos. Paradójicamente, años más tarde pusieron nombres de calles en una nueva barriada de casas de protección oficial a unos políticos claramente definidos por sus obras poéticas y que no tenían nada que  ver con el pueblo. A mi no me molesta que unas calles de mi pueblo se llamen Rafael Alberti, Juan Ramón Jimenez o Miguel Hernandez, los considero buenos poetas y los he leído bastante. Pero me duele, que no haya una dedicada a Manuel Fal Conde.

Quizá no sea demasiado tarde pera reivindicar la memoria de nuestro ilustre paisano en su propio pueblo, porque en Sevilla lo veo difícil. Ya lo intentó su hijo Domingo (qepd) y no le quisieron entender. Nuestro Ayuntamiento tiene la palabra.