En este caso no es mía. Me la envía Tamara Martinez, nacida Fiume Jaggy en Suiza y casada con Martín Martinez (QEPD) de Aroche. Extraordinaria pareja, grandes amigos y magníficos colaboradores en Asociaciones españolas y en el Partido Popular de Londres.
No conocía esta historia y no hace falta que la comente. Es una de las muchas que la derecha española calla, dando pie a la izquierda para recordar lo "mala" que era la derecha. Ya va siendo hora de dejar de remover todos estos horrores y trabajar juntos y unidos por el futuro de una España en la que nuestros hijos y nietos puedan vivir en paz y prosperidad.
Una vez terminada la guerra en el norte de España, a principios de 1938 fueron repatriados los restos de Olga, Octavia y Pilar a su ciudad de origen. Trasladadas en ataúdes blancos cubiertos por la bandera española, fueron depositadas con todos los honores en tres nichos en el interior de la catedral de Astorga, donde permanecen hasta la fecha. En 2006, descendientes de Pilar Gullón, en nombre de la fundación Enfermeras Mártires de Somiedo, pidieron a las autoridades eclesiásticas iniciar el proceso de beatificación.
MEMORIA HISTÓRICA
Las mártires de Somiedo (Asturias) eran enfermeras de la Cruz Roja de Astorga (León) que prestaban servicio en el hospital del Puerto de Somiedo, desde el 18 de octubre de 1936. No aceptaron ser reemplazadas al cabo de una semana por no separarse de los heridos.
El 27 de octubre, las milicias de UGT asaltaron el puesto. Ellas tuvieron la oportunidad de huir, junto a una veintena de soldados que evacuaron la posición tras un breve enfrentamiento, pero se negaron a abandonar a los heridos. De poco sirvió, porque los 14 heridos fueron asesinados en sus camas. Todos los prisioneros hechos ese día, incluidos el médico y el capellán, fueron también asesinados.
El jefe miliciano Genaro Arias Herrero las encerró en una vivienda dónde fueron brutalmente torturadas y violadas.
En la mañana del día 28 las arrastraron a un prado donde las ataron y amenazaron de muerte si no gritaban "Viva Rusia". Les quitaron la ropa y, hacia el mediodía, también la vida. Se oyó a Pilar Gullón moribunda gritar "Viva Dios" mientras le daban el tiro de gracia.
Fueron fusiladas por unas milicianas, entre las que estaban Felisa Fresnadillo, Josefa Santos, María Sánchez, María Soto y Consuelo Vázquez. Las milicianas ejecutoras de los disparos mortales fueron Evangelina Arienza, Dolores Sierra, y Emilia Gómez.
Por la tarde las milicianas vejaron los cadáveres y, llegada la noche, las arrojaron en una fosa común que cavaron dos prisioneros falangistas, asesinados poco después.
- Olga Pérez-Monteserín Núñez, de Astorga (23 años).
- Octavia Iglesias Blanco, de Astorga (41 años).
- Pilar Gullón Iturriaga, de Madrid (25 años).
Por favor, pasa este episodio de auténtica Memoria Histórica.
Ya está bien de contar medias verdades torcidas.