¿De cual?, ¿Del romano, del español, del británico....?. No. Del pequeño imperio, que Pedro el Guapo, se ha creído que podía formar con los que quieren romper España. "Pos va dao", dijo mi amigo Gracián cuando se enteró de que ya se ha creído con autoridad para criticar al Rey. Al Rey de todos los españoles, que juró la Constitución, en vez de prometerla por "imperativo legal", como hacen ahora los políticos que quieren modificarla o acabar con ella.
Algunos políticos, porque otros, cada vez más, prefieren saltarse las normas y utilizar las formas más variopinta para conseguir un sillón que le asegure la vida, al menos por cuatro años y una sustancial ayudita por otros más.
Creo que la caída del corto imperio de Sánchez ha comenzado ya y puede ser rápida, porque el paracaídas que le prestaba Susana Díaz y algunos de los barones socialistas, tiene cada vez má agujeros. Su obsesión de que Rajoy no sea Presidente del Gobierno es de tal magnitud, que ha cedido cuatro senadores, dos a Junqueras y otros dos a Más, para que puedan tener grupos propios en el Senado. Eso significa que los dos partidos tendrán más dinero público y más tiempo para intervenir en los debate en contra del Partido Popular, que tiene mayoría en la Cámara Alta. Dos partidos independentistas cuyos diputados en Cataluña, no han mencionado ni al Rey ni a la Constitución en la toma de posesión.
A Sanchez se le ha visto lo que quedaba del plumero. Ha cometido un enorme error que ha acelerado su caída. ¿Que le va a decir a sus barones, que pierden cuatro senadores y sobre todo a los que el 20 de Diciembre, en secreto, libre y voluntariamente, le han puesto una cruz al nombre de cuatro candidatos del partido socialista para que ahora, por decisión de Sánchez, representen a ERC y CDC, dos partido que quieren una Cataluña Independiente?.
No hace muchos años, los delitos de traición al Estado y desacato a la Corona, se castigaban con la horca. Ya eso es historia, pero en democracia, eso se paga en las urnas, porque es el pueblo el que ejerce la soberanía. Pero claro está, que hay que acatar unas leyes y unas normas establecidas por los políticos que han sido votados por el pueblo. Todavía, en una dictadura, tiene cierta excusa el no acatar los dictado de un dictador con el que no se está de acuerdo, pero en una democracia, no hay escusas que valgan.
"Las Leyes están para cumplirlas, nos gusten o no nos gusten. Y si no sirven, debe haber un método para modificarlas". Palabras textuales de Don Manuel, una vez que le advertí de que no llevaba el cinturón de seguridad en el centro de Londres, que ya era obligatorio. Se lo puso inmediatamente. Al contrario del señor Sánchez, que se salta las leyes y normas promovidas o aprobadas por su propio partido. ¿Cree usted que está capacitado para presidir el Gobierno de España?. Ni el de Murcia, que es la autonomía más pequeña.
Rectificar es de sabios. Sánchez todavía tiene tiempo para hacerlo y permitir la constitución de un Gobierno, presidido por Rajoy, que pueda mantener la unidad de España, la recuperación económica y la creación de empleo, en lo que todos debemos estar de acuerdo, y dejarse de chorradas, que no hacen más que poner palos en las ruedas. Después tendrá tiempo, todavía es jóven, de hablar de sus sueños de modificar la Constitución para una España Federal que no necesitamos, para lo cual sería imprescindible el apoyo del Partido Popular.