martes, 6 de agosto de 2019

EL LABERINTO NACIONAL

¿Saldremos de él?. Toda la prensa, de papel y digital, comentan las palabras de Su Majestad el Rey Felipe VI, sobre el laberinto nacional provocado por el Presidente "Con Votos" (aunque no sean suficientes) en Funciones, sin Presupuesto y gastando todo lo que le parece, que no es capaz de llegar a un acuerdo con el resto de la izquierda y no quiere hablar con la derecha.
Mi amigo Gracián ya le ha cantado aquella letra criticona que le sacaron al famoso pasodoble "Manolete", "Si no sabe negociar, pa que te metes". Lo de negociar, también rima con gobernar, hablar, dialogar o torear; que tampoco lo sabe.
Como tampoco sabe que Su Majestad el Rey es el Jefe del Estado Español, y por lo tanto, la máxima autoridad, y por supuesto, tiene el derecho de opinar. Por lo que se podría repetir otra vez el hecho histórico de que su bisabuelo El Rey Alfonso XIII, nombrara como Presidente del Gobierno a un General, que el 13 de Septiembre de 1923, había dado un "golpe de Estado" contra el Gobierno de la Nación, siendo Capitán General de Cataluña. 
Ahora se le conoce como el Dictador Primo de Rivera, aunque muchos le recordamos como el padre de José Antonio, que puso orden en España, hizo carreteras y consiguió unos años de crecimiento económico, paz y prosperidad.
Tampoco sabrá el Sr. Sánchez, que este hecho no fue fortuito y tuvo compañeros similares. Como el de Horthy en Hungría y el de Mussolini en Italia con el beneplácito del Rey Victor Manuel. Y tampoco debe saber que siempre son lo militares los que tienen que defender a las naciones. De los enemigos de fuera y de los enemigos de dentro. Así terminaron la I y II República española.
Si el Sr. Sánchez tuviera algo de sentido común y de Estado, que es más importante, en vez de tratar de apoyarse en comunistas, separatistas, nacionalistas y republicano, debería, antes que la cosa empeore, encontrar un sólido acuerdo con la derecha y llegar a un Pacto de Estado, que pudiera convencer a todos los españoles y emprender los problemas que nos preocupan a todos. El empleo, las pensiones, la unidad de la Nación, la seguridad o la educación. Y al mismo tiempo, poder hacer la reformas necesarias, tanto en la Constitución, como en algunas Leyes, para que consigamos la Democracia bajo una Monarquía Parlamentaría, que ya nos ha dado unos años de paz y crecimiento, que es en definitiva, lo que todos anhelamos.
Piénselo Sr. Sánchez. Usted pasaría a la Historia como el Gran Conciliador, que puso a España, otra vez, en el puesto que nos merecemos los españoles.