miércoles, 8 de agosto de 2012

ASALTO AL SUPERMERCADO

Tiene nombre de película, como aquella de "Asalto el tren de Glasglow", que inmortalizó a Ronald Biggs, para que al cabo de los años volviera a su Inglaterra querida, donde quería morir en paz y en la que ha pasado varios años en prisión hasta que fue liberado por motivos de salud, hace ahora tres años. Creo que vive todavía.
Esta vez el asalto no ha ocurrido en Gran Bretaña, sino en Andalucía y por triplicado. No han conseguido un botín en oro y libras esterlinas, sino en garbanzos, patatas, lentejas, azúcar, pan y carros enteros de cualquier producto comestible. Y los asaltadores llevaban sus correspondientes listas. Todo muy bien organizado y tramado por el Dick Turpin de los pobres andaluces en que se ha convertido Juan Manuel Sanchez Gordillo  que debe estar asesorado por buenos abogados, que le habrán dicho que el Código Penal no considera un delito si se roba algo para comer. Pero en este caso no era para comer, sino para demostrar que a ellos no les importan las leyes, el orden, la propiedad privada y ni siquiera los trabajadores que las están pasando canutas, mientras ellos, sindicalistas, gozan de un salario decente para no trabajar. Menos mal que no ha habido desgracias personales como ha ocurrido en otros asaltos similares en diferentes países, donde ha habido hasta muertos.
Lo que debe considerarse muerto y bien muerto y para siempre es el pacto socialistas-comunistas, que impidieron gobernar al PP en Andalucía, dejando a nuestra comunidad, no con un atraso de varios años, sino un atraso de setenta y seis años. Usted ya me entiende y sabe que me refiero a antes de la Guerra Civil. Entonces no había seguridad social, no había trabajo, no había comida para todos, lo que había era una coalición y un Gobierno Republicano entre socialistas y comunistas, que nos llevó a tal desorden y caos que tuvo que salir alguien a poner orden y aplicar la Ley. Costó muchas vidas y casi tres años. Y no aprendimos la lección. Si los dos partidos que desgobiernan en Andalucia, tuvieran algo de decencia, otro gallo cantaría. Izquierda Unida que tanto criticaba el uso y abuso de dinero público para pagar la jubilación de los socialistas y familiares y amigos y que tanto presumía de decente, se ha unido a los que han robado millones de euros de los trabajadores. El Partido Socialista que ahora condena la actitud de I.U. debería romper la coalición, acuerdo o contubernio con ellos y aceptar los que la mayoría de los andaluces dijimos en la urnas. Que gobierne el P.P.
Por las noticias de hoy me entero de la ocupación, por los mismos activistas del Sindicato Andaluz de Trabajadores que asaltan los supermercados, de la finca Las Turquillas, propiedad del Ejército de Tierra, desde el 25 de julio. Me da la impresión de que Canalsur TV. o la Cadena Ser no le había dado suficiente cobertura. O a lo mejor es que yo oigo las noticias de otros canales, porque no me he enterado hasta ahora, que con esto de la olimpiadas y aunque sean en Londres, me ha trastocado mis programas de la hora de la siesta, Hoy ha entregado la Guardia Civil la orden del juez de desalojar la finca y con toda desvergüenza y desacato a la Ley, han dicho que no se van. ¿Que están esperando, que intervenga el Ejército de Tierra?. Pues hasta ahí podríamos llegar. Luego nos quejamos de la imagen que damos en Europa, de que no se fían de nosotros, de que los mercados nos aprietan y la prima de riesgo no para de subir.
¿Quén tiene la culpa de todo esto?. Pues debe ser el Gobierno del Partido Popular, porque los otros son unos angelitos, que tienen las soluciones para la crisis (aunque nunca la aplicaran)  y que están deseando hundir a España como hicieron en el 36.
 Dicen que la Historia se repite y que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. ¿Alguien quiere que un día se levante un General, alto o achaparradito, con bigote o sin él,  para que ponga orden donde no lo hay?. Pues yo no. Todavía tenemos tiempo de demostrar que somos un país moderno y civilizado, que hemos aceptado un sistema democrático y que vamos a luchar todos juntos, "them and us" como decía ayer, para devolver a España el lugar que se merece en el mundo.