Ya sabíamos todos que el otoño iba a ser caliente. Hasta los meteorólogos, que tienen fama de equivocarse, parece que están de acuerdo.La piscina de mi urbanización continua abierta y las temperaturas en España casi superan los 30 grados. También la política supera los 30 grados y se pronostica que seguirá subiendo.Ya estamos sin gobierno o con un gobierno en funciones, que es lo mismo. Pero tenemos al Presidente en funcione, que nunca ha funcionado, con casi dos meses por delante para tratar de hundir a España más de lo que ya está.
Un amigo argentino, a quién conocí en el Reino Unido, me hablaba de su país y decía que "Argentina es un país tan rico, que por las noches recupera lo que los políticos roban durante el día". Si esto lo aplicamos a España, hay que referirse a las etapas de gobiernos. O sea, que con los gobiernos del P.P. se recupera lo que los gobiernos del PSOE (menos obrero y menos socialista) mangan, despilfarran o malgastan . No hace falta mucha memoria para recordar cómo terminó la economía con el gobierno de Felipe González, con el de José María Aznar y cómo va a terminar el de Zapatero. Yo he vivido el mismo proceso durante 34 años en el Reino Unido, entre los gobiernos de conservadores y laboristas. Como decía Margaret Thatcher: "Los socialistas pierden cuando se han gastado el dinero e los demás".

Lo de Aena, por el estilo. Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea, S.A. Gestiona 47 aeropuertos en España junto con 2 heliopuertos y 28 en el resto del mundo, con un montante e 200 millones de pasajeros. y unos ingresos de 2,094 millones de euros en el 2010.. ¿No es una compañía con suficiente prestigio internacional?, Con esas cifras creo que dejará buenos ingresos a las arcas del Estado.Posiblemente más que el controvertido impuesto sobre el Patrimonio, que va a recauda, poco y mal, a los ahorradores, que con una vida de trabajo y un ahorro constante, han podido crearse un patrimonio que dejar a sus hijos, mientras otros han vivido por encima de sus posibilidades confiados en las pensiones de Papá Estado. Y Zapatero tiene la desfachatez de anunciar, eso si, con una sonrisa, que puede haber más. ¡Que Dios nos coja confesados!.