La Semana de Pasión es la semana anterior a la Semana Santa y sirve para la preparación del hecho más importante para los cristianos. La muerte y resurrección de Jesucristo. En Sevilla se celebra el Pregón y el Viernes se conoce como el de Dolores.
La presente semana es semana de pasión para tres destacados socialistas. Mejor decir "socialistos", por aquello del género y porque se pasaron de listos.
Esta mañana, José Antonio Viera, ex diputado y ex consejero de Empleo de la Junta de Andalucía, declara ante el Juez del Supremo sobre el caso de los EREs . El jueves le tocará el turno a José Antonio Griñan, ex presidente de la Junta, que fue Ministro de Trabajo (más bien del Paro) y posiblemente el viernes será el turno de Manuel Chaves, también ex presidente y ex ministro de trabajo. Una semana de pasión para esos tres aforados que puede acabar, a menos que el Juez se lave las manos como Pilatos, en un proceso que les puede condenar a muerte. A muerte política , por supuesto.
Para colmo, el eurodiputado y ex ministro de Justicia de Zapatero, Juan Fernando López Aguilar, ha sido citado por el Tribunal Supremo a declarar como imputado por un delito de violencia de género. Vamos, para que se entienda, por pegarle a su mujer. El Juez dirá, pero es curioso ser acusado al amparo de una Ley que él mismo presentó siendo ministro de Justicia en defensa de la mujer.
Mientras tanto los dirigentes de Podemos, el Coleta, el Billetero y el Gafitas, andan perdidos. No han conseguido lo que esperaban en las elecciones andaluzas y estarán tramando qué hacer con las autonómicas y municipales del próximo mes. ¿Habrán ido a Venezuela por dinero para comprar votos? Cualquiera sabe. Lo que si es cierto es que los españoles, poco a poco, los van calando. Que ya llevamos cuarenta años sin dictadura y no queremos volver a lo mismo. Y menos a una dictadura de izquierda radical que son peores que las de derechas.