Me perdí el partido. Ya saben que no soy un forofo del fútbol, aunque en mi juventud, hace ya bastante tiempo, formé parte de un equipo de Higuera (hay por ahí una foto en la que soy el único superviviente) y de otro del colegio con el que jugué varias veces en el campo del Betis, contra un equipo de un colegio de Heliópolis.
Para mi era mucho más importante presenciar la llegada de nuestra Patrona, la Virgen del Prado, que llegó con puntualidad y rodeada de sus devotos que le acompañaban a pié, a caballo o en coches. Me alegré mucho cuando en Valencia ganaba por 2-0 y más todavía me enteré de que había terminado 2-1.
Cuando volví a casa pude ver algo en las noticias de las 24 horas y lo que más me gustó, no fueron los tres magníficos goles, sino el comienzo con el Himno Nacional y el niño (ya tachado de "facha") con el brazo en alto.
Me supongo Que la fotos y los vídeos ya estarán en todas los redes sociales (o insociales) llenas de comentarios a favor o en contra y con ataques al padre que lo educó, a la madre que lo parió y al que, abusando de un menor, le convenció a cometer tal desacato a la actual democracia con tan terrible signo franquista. Pues digan lo que digan, estoy seguro de que todos los que crecimos después de la guerra, saludamos de esa forma mientra cantábamos el Himno Nacional, con la letra de José María Pemán (ligeramente modificada por Franco. Y no solo ese himno, sino el Oriamendi de los Requetés y el Cara al Sol de los Falangistas. Y si me aprietan, también los que acudían a los campamentos de verano del Frente de Juventudes habrán cantado otros, como Montañas Nevadas, Isabel y Fernando, Camisa Azul, Caístes Camarada y algunas patrióticas canciones de aquellos tiempos.
Como prueba de esto, es conocida la anécdota de cuando un grupo de la izquierda, en los primero años de la democracia, quisieron mofarse de Franga en el Congreso de los Diputados y le cantaron el Cara al Sol. Este no se molestó, sino que simplemente hizo este comentario: "El caso es que todos lo sabían cantar".
Recuerdo que cuando fui por primera vez al cine en Londres, precisamente para ver la película El Cid, quedé asombrado cuando al terminar la película, salió en la pantalla una foto de la Reina Isabel II mientras sonaba la National Anthem y el público que abandonaba su localidad, se volvía hacia la pantalla firme y en silencio, hasta que este terminaba. En aquello años también había esa costumbre en España, lógicamente con la foto del Jefe del Estado e imagines militares, que muy pocos espectadores respetaban por sus prisas en abandonar el local.
Un día que me acompañaba un compañero de trabajo, también español, intentó seguir hacia la salida y un señor de recordó que estaban tocando en Himno Nacional. Le contestó que el era extranjero y el señor con toda calma, pero con evidente razón y seriedad, le recriminó: "Yes, I see, but you are in England". Que podemos traducir por "Cuando estés en Roma, haz lo que hacen los romanos".
Ya son cerca de la ocho y me marcho a ver el resultado de las votaciones, que por supuesto, sea el que sea, respetaré porque es la voluntad de nuestro pueblo. Y espero que los nueve jóvenes que salgan de las urna, sean todos capaces de olvidarse de diferentes ideologías y empiecen todo juntos a trabajar por el bienestar de todos nuestros paisanos.