Acabo de firmar en Internet una petición al Presidente José Luis Rodríguez Zapatero, o al revés según el nuevo orden de los apellidos, para que el Gobierno levante la prohibición de acceder a la Basílica del Valle de los Caídos. La campaña está organizada por Hazte Oír y se espera recoger suficientes firmas para que el Gobierno de marcha atrás. Sería lo acertado, porque, como decía Fraga, los socialistas aciertan cuando rectifican.
Al parecer el Gobierno ha dado un paso más hacia el cierre del Valle de los Caídos, hasta el punto de que desde el día 3 de noviembre, el Vicepresidente Rubalcaba ha dado órdenes a la Guardia Civil para impedir la entrada al recinto tanto a los monjes como a los fieles, que se ven obligados a oír Misa en un pinar fuera del complejo monumental.
Esto me recuerda al Cardenal Segura, cuando mandaba quitar las Cruces por los Caídos de las paredes de las iglesias porque eran signos políticos. En la iglesia de mi pueblo todavía se nota en la pared sur de la torre, la marca de dónde estuvo la Cruz de madera, que pueden ver en la foto, y que hubo que quitar por amenaza de excomunión a la corporación municipal. Se sustituyó por un pequeño monumento en donde ahora está el busto del escultor Sebastian Santos, que también hubo que quitar porque aquello era terreno de la Iglesia. Hubo que desmontarlo y pasarlo al terreno bajo los escalones. De allí se quitó años mas tarde para pasarlo a la Plaza de las Flores y de allí desapareció y nunca más se supo. Iría a parar al mismo sitio que los azulejos del Cuartel de la Guardia Civil que recordaba los guardias asesinados en el 36 y los del Colegio que llevaba el nombre de mi padre.
¿Memoria Histórica?. Quieren enterrar algo que no se podrá hacer nunca. Los que vivimos aquellos años se lo podemos pasar a nuestros hijos y quizás a nuestros nietos, pero según mi profe de informática, lo que se sube a Internet se queda ahí para siempre.
Pocos saben que el Valle de los Caídos fue una idea de Franco para que los restos de los que habían luchado en la Guerra, en ambos lados, pudieran descansar en paz todos juntos bajo la grandiosa Cruz que remata el monumento como sigo de perdón, recuerdo y paz. Especial ubicación se le dio a los restos de José Antonio Primo de Rivera, ejecutado por ser un político de derechas, señorito aristócrata, abogado y defensor de los trabajadores. Franco quería ser enterrado en el Pardo y fue el Gobierno el que decidió que fuera en la Basílica del Valle. Bien es verdad que allí yacen los restos de más caídos del bando franquista que del bando rojo, pero también es verdad que los familiares de muchos de estos últimos se negaron a ello. Al cabo de 71 año, quieren remover el pasado y ahora es contra la Iglesia y los signos religiosos, porque el Gobierno y su responsable, no saben que los gobiernos laicos no van contra ninguna religión, sino que, simplemente no intervienen y, por supuesto, no se ponen en contra de ninguna.
Dentro de tres días será el aniversario de Franco y José Antonio. Ayer ya venia en ABC una esquela anunciando una Misa por Franco. Habrá mas Misas por ellos y , si no pueden ser en la Basílica del Valle, serán en otras iglesias o debajo de los pinos, que a Dios lo mismo le da donde sea. Todavía quedamos muchos que creemos que nos libraron del comunismo y pusieron las ideas y los cimientos para la España actual. ¿De verdad queremos volver al pasado y tropezar otra vez en la misma piedra?.
