Hoy es domingo. Día de descanso, pero no se puede descansar con los que nos espera dentro de siete domingos. A estas horas ya estaremos los andaluces, espero que muchos porque nos jugamos nuestro futuro, dispuestos a emitir un voto que no debemos omitir. Aunque todavía queda tiempo para los indecisos, muchos ya lo tenemos decidido, conviene ir recordando lo que cada Partido, ha hecho, está haciendo y dice que va a hacer.
Ayer ya fue un día completo de campaña electoral, aunque estemos en precampaña. La diferencia es que en precampaña no se debe pedir directamente el voto pero si descalificar al aversario El Presidente del PP en Barcelona, el Secretario General de los Socialistas en Valencia y el Coleta en Madrid, ya están calentando el ambiente.
Por cierto que la candidata andaluza, se perdió el mitin en Valencia donde se le esperaba al lado de Pedro el Guapo. Y es que a la pobre se le está poniendo la cosa difícil. Se excusó con una severa gripe. Igual que se excusó por no asistir a la apertura del curso 2013-2014 de la Universidad de Granada por estar enferma de no se que dolencia, Que no sería muy grave, porque ese mismo día recibió a la señora Botín, ya Presidenta del Banco Santander, en su residencia de San Telmo. Por lo visto estaba más interesada en el dinero, poderoso caballero, que en la educación andaluza que Rajoy recorta, cuando la competencia en educación la tiene transferida la Junta. Las malas lenguas dijeron que la enfermedad era "vergüencitis" O sea, vergüenza del dinero que la Junta debía a la Universidad y que no sabría cómo explicarlo ya que los rectores, no creerían que la culpa era de los recortes de Rajoy. Con su embarazo, posiblemente tenga más excusas para no asistir a sitios que no le convenga.
El Coleta lo pasó en grande con la marcha en Madrid, con los 300,000 asistentes, según los organizadores y 100,000 según la policía, (¿a quién vamos a creer?) y sus banderas republicanas ondeando al aíre fresco de la mañana. La mañana del día en que el tic tac del reloj empieza a marcar el camino del final de Rajoy. Eso suena a que el final de Rajoy dependa de una bomba de relojería. Ya se intentó, por sus amigos de la ETA, con Aznar. Pero el reloj no sería de los que regalaba Caja Madrid y se equivocó en unos segundos. El que quiera saber lo que dijo, que compre ABC y El País para, que al menos, se entere de dos versiones. Y si no se fía de la prensa, que hubiera ido en persona.
Y hablando de la prensa. Estoy convencido de que en España no se lee suficientemente la prensa. En mis año en el Reino Unido comprobé que un buen porcentaje de casas tenían, al menos un periódico diario. En muchos casos dos, el marido y la mujer. Casi todos los camioneros llevaban su periódico encima del salpicadero y recuerdo haber visto a un conductor en la autopista M4 con el periódico sobre el volante, supongo que con un ojo en el papel y el otro en el coche precedente. Por supuesto los había de derechas y de izquierdas y también independientes. Y cada uno compraba el que más le atraía por su contenido político, deportivo, financiero, noticiero y hasta los dedicados a lo que aquí llaman "del corazón".
Yo compraba en la estación del metro el Daily Telegraph y la edición de ABC internacional que se imprimía en Bruselas y estaba en Londres a primera hora de la mañana.
Uno de los más populares de la clase media era The Sun. El sol que mostraba diariamente en su tercera página uno de sus mayores atractivos, era la foto a página completa de una atractiva chica, todo lo ligera de ropa permitido, como pueden ver si siguen leyendo.
En una campaña para elecciones generales en la que los Laboristas prometían defender a las feministas que luchaban contra la explotación sexual de la mujer, los lectores se encontraron con la página tres totalmente en blanco con esta nota en el centro de ella: "Así verán ustedes esta página, si los laboristas ganan las elecciones". Por supuesto ganaron los conservadores.
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