sábado, 31 de mayo de 2014

¿PODEMOS?

¿Podemos hablar con claridad?. Me supongo que si podemos, porque Podemos es defensor de la libertad de expresión y de otras muchas libertades y hasta del libertinaje.
La primera sorpresa en mi pueblo fue la aparición en los paneles del Paseo de un partido pidiendo el voto del que nadie había oído hablar. Unos carteles con la foto de familia entre los que aparecía un tío que habíamos visto casi todos en televisión. Algo así como la versión masculina de Belén Esteban o Antonia De-Latte, aunque más parecido, por la barba, a esa que ganó la canción de eurovisión, que no recuerdo como se llamaba, ni voy  perder el tiempo buscándolo. Un personaje televisivo poco amigo de los peluqueros al que ya le había oído decir algunas barbaridades.
La segunda sorpresa fue la aparición por todo el pueblo de unos carteles anunciando la presentación del Podemos local. Tuvieron la falta de delicadeza de poner uno de los cartelitos pegado en la puerta del Ayuntamiento, que les había cedido gratuitamente el local del antiguo "Casino de los ricos". para la "pobre" presentación. Y digo pobre, por el número de asistentes y el contenido de las ideas, que tuve la paciencia de escuchar. Estábamos algo así como un máximo de 27 personas. Eso si, con casi estricta cuota de sexos. Junto a los directivos del partido y algunos jóvenes, había los (y las) de Aracena, algunos socialistas locales (¿qué harían allí?), el concejal de Cultura, supongo que por educación, y mi hermano y yo, por simple curiosidad. A la hora anunciada no había nadie en el salón y el acto comenzó, con puntualidad andaluza, casi una hora más tarde.
Los chicos del pueblo no lo hicieron mal. Apuntaron algunas cosas, como la corrupción, la democracia interna de los partidos o la financiación de los mismos, en las que podemos estar de acuerdo. Pero otras muchas en las que discrepamos. Hasta ahí,  bien. Pero cuando una de Aracena, vestida como la Pasionaria, empezó a soltar una soflama del más puro estilo marxista-lenilista. me fui al bar Jacarandá a tomarme un Rió Viejo, que es un jerez excelente.
La última sorpresa ha sido el domingo, cuando mis paisanos le dieron 40 votos a Podemos. Era de esperar que mi partido no barriera, porque las medidas necesarias que ha tenido que tomar el Gobierno no nos gustan, empezando por el propio Presidente que así lo ha reconocido. Era de esperar que el PSOE se llevara un varapalo por la ridícula oposición que están haciendo, la falta de programa y propuestas y el espectáculo en el Congreso de los Diputados. Parece increíble que de los 41 partido que se presentaban, este pueblo haya votado a 21 de ellos. Todavía no se han enterado que Podemos está a la izquierda más extrema y revolucionaria que podamos imaginar. Con un líder que debe saber bastante de política, para eso es profesor en la Complutense, que ha conseguido lo que quería: Un escaño bien remunerado para él, engañando a una juventud marginada, ni-ni, sin esperanza, sin ilusiones y totalmente descontenta, a la que han hecho creer que en Cuba, Venezuela o Bolivia, se vive mejor que en España y el resto de Europa. Y él mismo se ha llevado la sorpresa de haber conseguido otros cuatro escaños para sus desconocidos socios. 
Después de esta marimorena de partidos, los dos mayoritario deben cargarse las pilas, apretarse el cinturón o, como dicen los británicos: "To pull yours socks up". De otra forma vamos desgraciadamente a dividir y destruir España y Europa. ¿Es eso lo que pretenden?.       

miércoles, 28 de mayo de 2014

ELECCIONES EUROPEAS 2014


Llevaba ya algún tiempo sin tocar este teclado. No me sentía con ánimo después de la perdida de la que fue mi compañera durante 50 años. En octubre íbamos a celebrar las bodas de oro. Dios no lo ha querido, pero me ha dado fuerzas para continuar, rehacer la vida y seguir algo en lo que siempre me ayudó. Era mi asesora política. Los británicos llevan la política en su sangre, aunque no hablen de ella, ni discutan, ni creen polémicas, ni pierdan el respeto al adversario. Ese que aquí llaman "enemigo", simplemente por tener otras ideas. Siempre me acompañaba a todos los actos políticos en Londres, a los congresos en España desde el VI de Alianza Popular celebrado en Barcelona en 1984 y me daba ideas cuando tenía que preparar alguna intervención.
Por supuesto la echaré de menos en este artículo que también incluye a su propio país. Pero se perfectamente que me aconsejaría que no omitiera la diferencia entre los resultados de las eleccione de ayer en España y en el Reino Unido. Porque "Spain is different" .
En España ha ganado el Partido Popular que está gobernando, dejando al Partido socialista en segundo lugar. Bien es verdad que ambos han perdido muchos votos, el P.P. por la política austera de los recortes y el PSOE por la descomposición interna y la falta de liderazgo. Eso ha hecho que el electorado, que no es tan maduro como dicen, se hayan ido a partidos marginales que no  nos llevan a ninguna parte ya que muchos han conseguido solo uno o dos escaños. España tendrá un total de 11 partidos en la eurocámara de los 41 que se presentaban. ¿No les parecen demasiados?.
 En el Reino Unido ha  ganado el partido de los Euroescepticos (que nunca ha gobernado) y el Conservador que gobierna, ha bajado al tercer puesto empatando en escaños con los Laboristas y dejando a los Liberales en el cuarto puesto. Tendrá cuatro partidos en la eurocámara. Y es que los británicos son así. Nunca han sido partidarios de Europa y en la presente crisis han desconfiado aún más de Europa. Ya saben que no aceptaron el euro, porque están apegados a su libra esterlina y siguen creyendo que son superiores al resto del mundo. Ya el General De Gaulle, que los conocía muy bien, dijo aquellos de "Los ingleses entrarán en la Comunidad cuando dejen de creer que siguen mandando en el mundo". Pues todavía se lo siguen creyendo y solo aceptan las decisiones de otros cuando le conviene. ¿Cuanto tiempo hace que las Naciones Unidas decidieron que el problema colonial de Gibraltar debería solucionarse entre los dos países?. Ni caso. Claro que Felipe González les abrió la verja y Zapatero le dio voz y voto a los llanitos, y como dice mi amigo Gracián; "Jodieron la marrana".
Bueno, ya me he salido del tema. Pero es que yo también les conozco como el General porque conviví con ellos treinta y cuatro años. Pero como todos, tienen sus cosas buenas y sus cosas malas y muchas veces debemos admirar las buenas y aprender de las malas.
El sentido del patriotismo, que desgraciadamente hemos perdido en España, es una de las buenas, Ellos están orgullosos de su país, de su lengua y de su bandera. Dicen: "I am british", con más énfasis que  un catalán pueda decir: "Yo soy del Barça". En España se ha perdido el sentido de la Patria, hasta el punto de que preferimos lo foráneo antes que lo español y solo ondeamos nuestra bandera en los partidos de fútbol, porque nos han convencido de que el patriotismo y la bandera roja y gualda eran cosas de Franco y el que la lleva es un facha. Pocos sabemos que los colores de nuestra bandera tienen más años que los de la bandera británica. En 1801, cuando Gran Bretaña se anexionó el norte de Irlanda, se unieron en la bandera los tres colores de las tres antiguas naciones que forman el Reino Unido: Inglaterra, Escocia e Irlanda del Norte. Se olvidaron del Principado de Gales.
Los colores de la nuestra datan de 1786 por real decreto del Rey Carlos III, cuando España era una sola nación desde 1492. Desde entonces han sido los mismos menos durante la nefasta II República que introdujo el color morado (tengo que confesar que no se que significa) que en el lenguaje taurino se conoce como "nazareno". No creo que guarde relación alguna ya que durante esa República se quemaban las iglesias. Solo ha variado el escudo, según la época, el sistema político o la dinastía reinante.
El Reino Unido tendrá cuatro partidos, los dos grandes tradicionales de izquierda y derecha (ambos centrados), el Liberal y los ganadores que no creen en Europa. Yo me pregunto; ¿Si no creen en Europa, que hacen allí?. Y lo curioso del caso es que este partido está formado por descontentos de los dos principales.
En España, por lo contrario,han conseguido representación 10 partidos. Los descontentos de los partidos mayoritarios se han escorado peligrosamente a la izquierda, a I.U y Podemos, y a los nacionalistas-independentistas. Todo un complejo de pequeños partidos que no van a ninguna parte solo a encumbrar a unos cuantos políticos o profesores tertuliano que se han ganado un bien remunerado puesto de poco trabajo.
Se dice que ha sido un palo al bipartidismo. Malo. Los países más avanzados y prósperos son precisamente aquellos que tienen dos grandes partidos, en los que caben todas las ideas moderadas de derecha e izquierda, que se alternan en el gobierno, como EE.UU, y el Reino Unido. Y en los que no existe, o no se permite, el partido comunista. No hay extremismos y si hay centrismo. Y los electores saben lo que les conviene y votan en consecuencia por una alternancia estabilizadora.
¿Cuando aprenderemos?.

jueves, 22 de mayo de 2014

EMIGRACIÓN / INMIGRACIÓN IV

 
He dejado para el último a mi hermano Marcos, que emigró después del fallido intento de Paco. Marcos, que ya no está con nosotros, llegó al Reino Unido con su esposa Prado después  de contraer matrimonio, como en viaje de novios, cuando lo tradicional era "la luna de miel en Mallorca" y con todos sus papeles en regla en el verano de 1964. 
Empezaron a trabajar en el Thames Hotel de Maidenhead, él de camarero en el comedor y ella de camarera de habitaciones. con acomodación en un cercano apartamento al otro lado del río. Yo trabajaba y vivía en un restaurante cercano, también a orillas del río llamado The Waterside Inn en Bray. En octubre de aquel año me casé con Patricia y mi hermano fue "the best man".
En el Reino Unido "el mejor hombre" (amigo o familiar) compaña al novio mientras la novia es acompañada por su padre, que es quien la entrega al futuro marido.
En abril de 1965 nació mi sobrina María del Prado y en agosto mi hijo Rafael. Pasamos dos años más con la alegría de estar dos parejas unidad con dos niños que crecían juntos. Hasta que yo recibí mi permiso de estancia como residente en el país y encontré trabajo en una compañía española de importación de frutas y nos fuimos a vivir a Londres en el famoso barrio de Wimbledon. Siempre recordaré ver a Manolo Santana perder el primer partido del año siguiente a ganar dicho campeonato. Todos los domingos íbamos a Maidenhead a ver a la familia y algunos amigos, pero después de un año, cansado del tren y del metro hasta el centro de Londres, dejando a Patricia y a nuestro hijo en un lugar donde no conocíamos a nadie todo el día solos, arrendamos una casa allí, cercana a la autopista que llevaba a Londres, ya que le habíamos cogido cariño a la bonita ciudad. 
Prado se vino a España para tener a su segundo hijo y ya no volvió.  Mi hermano vino al nacimiento y volvió al Reino Unido por un corto periodo, hasta que encontró un trabajo en Sevilla donde pasó el resto de su vida.
Creo que con estas cuatro historias queda bien claro que las leyes de inmigración en el Reino Unido se cumplen, como debe ser, y que los extranjeros que así lo hacen pueden vivir en el país por el resto de sus vidas.