Con esta manía de enmendarle la página a la RAE que tienen las feministas progres y los socialistas que se apoyan en ellas, ya no sabemos a ciencia cierta cómo hay que llamar a las cosas. Mi amigo Gracián, hablando de esto y después de dos o tres copas, inició un crítico y posible discurso de apertura del año escolar, diciendo "Señoras y señores, vecinos y vecinas, higuereñas e higuereños, los niños y niñas que hay empiezan el curso en este colegio público o escuela pública, tendrán unos profesores y profesoras......". Por eso, el dice que toda esta historia está fraguada con los fabricantes de cartuchos de tinta para las impresoras; que mientras más palabras, más tinta.
No se si quedarme con "violencia de género", "violencia doméstica", "violencia contra la mujer", "Violencia machista" o como ha dicho la Ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato Adrover, ante el último caso: "Llámelo como quiera pero es un asesinato". Y ya van en este año, sesenta asesinato de mujeres por su pareja o ex pareja. Ayer saltó la noticia de otra mujer encontrada muerta, degollada y atada a la cama, en la barriada sevillana de Bellavista, En este caso todas las sospechas caen sobre otra mujer con la que mantenía una relación sentimental de años. ¿Como se llama esto?. ¿Violencia de genero lesbiano?, ¿Violencia de genero feminista?. Porque las mujeres también matan, maltratan a sus parejas y les hacen la vida imposible. Lo que ocurre es que muy pocos hombres van a la policía a denunciar maltrato de su mujer. Pero "haberlos, hailos". Yo tengo una mujer extraordinaria, pero conozco algunos que no y las aguantan con resignación o han tenido que separase civilizadamente.
España tiene fama de tener demasiadas leyes que no se cumplen; lo vemos todos los días. En las carreteras, en los bares, en las calles, en las discotecas, en las botellonas y siga usted y no se pare. Cada nuevo Ministro que toma posesión de su cargo quiere pasar a la historia por haber promulgado o reformado una Ley. Desgraciadamente es así. La Ley de Violencia de Género no ha funcionado y su promotora, Leire Pajín, ya ha buscado la controversia con la nueva Ministra acerca de como se debe llamar el asesinato de una mujer por su pareja, en vez de buscar una reforma que la haga viable y termine con esos horrendos crímenes que van a más. Las Leyes, nos gusten o no no gusten, están para acatarlas. Y si no funcionan, se pueden cambiar. La de la Violencia no ha funcionado y algo habrá que hacer.